En los últimos meses se han detectado un mayor incremento de desplazamiento de familias debido a la inseguridad que se vive el norte de Tamaulipas.
El presidente de la Federación de Cámaras de Comercio (Fecanaco), Julio Almanza Armas, indicó que detectan una especie de refugiados internos, es decir, personas afectadas por la situación de inseguridad lo que los obliga irse de sus lugares de origen para moverse a otras zonas del estado donde consideran estar más tranquilas, tema donde solicita a las autoridades intervenir.
“El caso más reciente es el del ejido Santa Ana de Río Bravo, cuyas familias enteras salieron en éxodo huyendo a Reynosa; situación que preocupa enormemente al constituir un clara muestra y foco rojo de que el tejido social está descompuesto y que el estado no puede ni debe minimizar o pretender asegurar que no pasa nada”, dijo el directivo.
Tras meses de estar en medio de situaciones de riesgo, atentados contra la red eléctrica que constantemente los deja sin luz, así como estar entre el fuego cruzado, familias abandonaron el mencionado lugar.
Explicó que los principales conflictos son entre grupos criminales y el combate a la delincuencia organizada, que provoca un éxodo por miedo, genera un clima de miedo y terror en la población, obligándolos a abandonar sus hogares y comunidades en busca de refugio y protección.
Así mismo, indica que es un problema inédito y alarmante para el sector comercial de esta región.
“La creciente inseguridad y violencia en el estado de Tamaulipas provoca una inédita y alarmante situación de desplazamiento interno de familias enteras, quienes abandonan sus comunidades y patrimonio para trasladarse a zonas que consideran más seguras”, expuso Almanza Armas.
Por lo que, Almanza hace un llamado a las autoridades a mejorar la coordinación interinstitucional y a fortalecer las estrategias de seguridad evitando esta nueva forma de huir para protegerse de la violencia.
alhv