El comisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño, señaló que duerme tranquilo tras la tragedia de la estación migratoria en Ciudad Juárez porque él se ubicaba a mil 800 kilómetros de distancia en el momento del incendio, por lo que no piensa en renunciar a su puesto.
“Yo estaba a mil 800 kilómetros de distancia del suceso, no podía yo llegar en tres minutos en que se suscitó el accidente, en el cual dos venezolanos provocaron con dolo el incendio y empleados del INM irresponsablemente no localizaron la llave”, dijo en atención a los medios de comunicación.
Ante la pregunta de que si dormía tranquilo, el funcionario dijo que sí, porque él no estaba en el lugar de los hechos.
Sobre la posibilidad de renunciar a su cargo para agilizar la investigación que realiza la Fiscalía General de la República, Garduño dijo que las autoridades han priorizado la presunción de inocencia.
“El juez fue quien ordenó que no me podían revocar el cargo porque hay presunción de inocencia, pero algunas gentes ya me acusaron, me procesaron, me condenaron”, destacó.
Sobre el posible apoyo que le pudiera brindar el presidente Andrés Manuel López Obrador para sortear de mejor manera su proceso judicial, el comisionado dijo que en esta administración no se utilizan las amistades para cuestiones judiciales o de trabajo.
jvl