El Instituto de Física de la UNAM informó que el Laboratorio Nacional de Espectrometría de Masas con Aceleradores (LEMA) llevó a cabo un estudio de datación por carbono 14 en un conjunto de muestras proporcionadas por un cliente. Sin embargo, enfatizó que se desvincula de cualquier uso, interpretación o distorsión de los resultados que pudiera surgir posteriormente.
En una sesión en la Cámara de Diputados celebrada ayer, Jaime Maussan presentó lo que él describe como dos cuerpos de seres no humanos que supuestamente fueron descubiertos en una mina en Perú, ubicada entre las ciudades de Palpa y Nasca, en el año 2017.
- Nacional
Este miércoles, el instituto informó en un comunicado que en mayo de 2017, el LEMA realizó un estudio de datación por carbono 14 a un conjunto de muestras que según la información proporcionada por el cliente, eran de piel y de tejido cerebral de aproximadamente 0.5 gr, cuyos resultados fueron emitidos en junio del mismo año y entregados al usuario que lo solicitó.
Se indicó que por tratarse de un convenio comercial, estos resultados son confidenciales y ningún integrante del LEMA puede difundirlos.
Aclaró que los trabajos de datación por carbono 14 que se llevan a cabo en el LEMA únicamente están destinados a determinar la antigüedad de la muestra que trae cada usuario y en ningún caso hacen conclusiones sobre el origen de dichas muestras.
“Los integrantes del LEMA no realizan ningún tipo de muestreo ni entran en contacto con la fuente original de la muestra in situ."
“El LEMA se deslinda de cualquier uso, interpretación o tergiversación posterior que se haga con los resultados que éste emite. En el caso del análisis de junio de 2017, cualquier información que implique la participación del LEMA en cualquier actividad distinta a la datación por Carbono 14, carece de total validez”, concluyó.
¿Qué son los restos “no humanos” que Maussan mostró frente a los diputados?
Luego de dos horas y medio de charla, Jaime Maussan expuso la sorpresa que ofreció desde el principio. En ese momento dio la instrucción de abrir dos urnas con los restos de dos osamentas, las cuales medían cerca de 60 centímetros y fueron identificados como “no humanos”; sin embargo, el investigador se negó a llamar extraterrestres.
Maussan dio a conocer que, según un análisis de carbono 14 de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), estos seres tienen más de mil años de antigüedad.
“No se trata de seres que fueron recuperados en naves, que son estrellamientos, sino son seres que estaban sepultados en minas de diatomea”.
bimc