Hugo, de 12 años, practicaba educación física en una secundaria pública de la capital de Durango; Luis, de 14, corría en el patio de su colegio en Umán, Yucatán. Ambos perdieron la vida dentro de un plantel educativo por un infarto fulminante. El caso más reciente, fue el del niño Abner, de 6 años, quien murió ahogado durante una clase de natación en el Colegio Williams, en la Ciudad de México.
Las tres muertes ocurrieron este año en un lapso de apenas cinco meses, pero desde 2017 se han contabilizado al menos 98 fallecimientos de niños menores de 14 años que sufrieron accidentes o lesiones intencionales dentro de sus escuelas, de acuerdo con los registros del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los decesos en horarios de clases se ubican como un hecho poco frecuente, ya que solamente representan el 0.5 por ciento de las 18 mil 259 muertes de niños y adolescentes registradas en el último lustro. Sin embargo, el promedio de fallecimientos dentro de las escuelas se ubica en uno cada 22 días a lo largo de los más de 205 mil planteles que operan en territorio nacional.
De acuerdo con el Manual de Seguridad Escolar de la Secretaría de Educación Pública (SEP), “la escuela debe ser el lugar más seguro para la infancia, después del hogar”, por lo que está en constante coordinación con la Secretaría de Salud con el fin de “prevenir riesgos, manejar contingencias de origen natural o social y garantizar que existan escuelas y comunidades protegidas ante situaciones de riesgo”.
Los esfuerzos realizados para prevenir riesgos que afecten la salud física y emocional de los alumnos ha derivado en que en los últimos años se ha presentado una clara disminución de las muertes dentro de los planteles educativos, ya que la cifra anual de casos ha presentado reducciones constantes desde 2018.
Las cuentas del Inegi señalan que en 2017 se presentaron 37 decesos provocados por lesiones ocurridas en planteles educativos, pero al año siguiente la cifra se redujo a 26 casos y para 2019 las muertes se ubicaron en los 20 casos. De esta manera, se registró una reducción de 45.9 por ciento en un lapso de solo dos años.
Posteriormente, en 2020, año en que las escuelas estuvieron cerradas durante casi 9 meses por la llegada de la pandemia de covid-19, se reportaron 8 muertes provocadas por accidentes en escuelas públicas; y para 2021 la cifra todavía cayó aún más, pues solo se reportaron cuatro muertes de niños menores de 14 años.
Causas de muerte
En las bases de datos del Inegi se puede saber, en algunos casos, la causa que originó la muerte de un alumno dentro de las instalaciones educativas, pues de los 95 decesos que se contabilizaron entre 2017 y 2021, solo en 29 se cuenta con detalles de lo que originó el deceso de los infantes.
En esos casos, los certificados de defunción revelaron que las caídas y las agresiones fueron las principales causas de muerte en las escuelas con 8 casos cada uno y le siguen los casos por ahogamiento y sumersión accidentales con seis defunciones, tal como ocurrió en el caso del niño Abner, quien estudiaba en el Colegio Williams.
Otras causas de muerte con menor prevalencia fueron las lesiones autoinfligidas con dos reportes, de igual manera que el envenenamiento accidental (2) y la exposición al humo, fuego y flamas (2); y con solo un caso se registró la muerte de un menor por accidente de transporte.
En lo que respecta a la geografía de defunciones en colegios, el Inegi explica que el Estado de México es la entidad con más casos en el último lustro al sumar nueve muertes, la mayoría de ellas (7) ocurrieron entre 2017 y 2019.
Actualmente la Secretaría de Educación del Estado de México cuenta con el programa de Seguro Escolar contra Accidentes para el Ciclo Escolar 2022-2023, el cual cubre gastos médicos por 25 mil pesos y añade una indemnización por muerte accidental y/o pago por gastos funerarios por 40 mil pesos.
Los casos en los que se puede hacer válido el seguro es cuando ocurra un accidente dentro del plantel educativo, en el trayecto directo de la casa a la escuela y viceversa o al asistir a alguna actividad programada por la autoridad educativa como desfiles, visitas guiadas o excursiones.
En la Ciudad de México se contabilizan seis muertes por lesiones ocurridas dentro de los horarios escolares, mientras que entidades como Jalisco, Puebla y Morelos registran cuatro defunciones desde 2017.
cog