Minutos antes de la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la conmemoración del centenario luctuoso de Pancho Villa en La Coyotada, el nieto del Centauro del Norte, Francisco Villa Campa y su familia irrumpieron la ceremonia.
"Buenos días, soy Francisco Villa Campa, nieto de Pancho Villa", dijo.
En compañía de su familia, el descendiente del general de la División del Norte se acercó a los asistentes para reclamar que no había sido invitado a la ceremonia y aseguró que estaba en espera de los funcionarios.
"Hasta que llegó el presidente se nos permitió el acceso. Yo me pregunto, un festejo, porque hoy es un festejo recordar a Pancho Villa, sin la familia de Pancho Villa, un festejo sin el pueblo de México no es festejo. Desde aquí levanto mi voz el pueblo debe de ir unido, juntos caminar para poder crecer como nación", gritó.
No dejaban entrar a nieto del Centauro del Norte
Ya con la atención de cámaras e invitados, aseguró que no fue hasta que llegó AMLO que se le autorizó el acceso a la ceremonia.
Mientras, su familia, reporteros y curiosos grababan con el celular.
"Hoy se cumplen 100 años del asesinato de Francisco Villa, creo que estaría gustoso de saber que 100 años después se le sigue recordando con mucho cariño, pero creo que también entristecería, pondría su voz en alto, saber que para llegar aquí su nieto Francisco Villa, Francisco Villa González, Cristóbal, Romina, tuvimos que levantar la voz.
"Me señalaban que cuál era mi acreditación, esta es mi acreditación, mi INE, documento oficial, mi nombre. Vengo de los eventos de Chihuahua y hoy me presento al centenario en la Coyotada y me quisieron marcar un alto", reclamó.
Y evocando la rebeldía y liderazgo de Villa, se regresó a la entrada del evento para dar paso a decenas de personas que simpatizan con la 4T, unos que pedían dejar que se contaminara el agua por las mineras en el estado y otros que con pancartas mostraban su apoyo a López Obrador "AMLO, siervo de Dios, el pueblo te ama".
Restaurarán ícono de la Revolución
En la ceremonia, se anunció que desde Cuba se va a restituir un revólver que perteneció a Francisco I. Madero y que fue entregado a Villa. El arma, será resguardada y exhibida en el Museo Histórico de la Revolución de la Secretaría de la Defensa ubicado en Chihuahua.
Tomó la palabra el historiador Pedro Salmerón y las autoridades montaron una guardia de honor en la estatua de Francisco Villa.
La ceremonia terminó sin que el presidente tomara la palabra, eso sí, se dio tiempo de saludar y tomarse fotos con los asistentes, entre ellos, el nieto y los bisnietos de Villa que caminaron junto a López Obrador hasta que se retiró del evento.
rcm