Un balonazo en el estómago mientras jugaba futbol terminó en una lesión grave para un menor de 15 años de edad, que ahora se debate entre la vida y la muerte en un hospital en el municipio de Tuxtepec, Oaxaca.
Kevin Alejandro Zacarías Morales jugaba como portero en una 'reta' en una cancha de la unidad deportiva del fraccionamiento Costa Verde, cuando recibió un fuerte balonazo en el estómago que lo derribó por el intenso dolor.
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De acuerdo con testigos, Kevin se intentó levantar pero se desvaneció y convulsionó. Durante varios minutos pensaron que era algo normal, así que entre compañeros y rivales de cancha intentaron 'soplarle' aire, sin embargo, un testigo refirió que el menor "se puso de color azul".
"Le quitamos los zapatos y una persona le dió reanimación cardio pulmonar (RCP), pero Kevin tampoco reaccionó, convulsionó y luego se quedó quieto, los pies ya los tenía blancos", dijo uno de los testigos.
Fué hasta entonces que alguien corrió hasta las instalaciones de la Cruz Roja, que están enfrente de la unidad deportiva, pero tuvieron que rodear el camino por más de 500 metros debido a que el acceso de la calle Francisco I. Madero está cerrado, situación que causó indignación, y así después de varios minutos y vueltas por fin dieron aviso a los paramédicos.
Al llegar los voluntarios indicaron que no tenían ambulancia disponible, por lo que posteriormente uno de los compañeros del futbolista marcó al número de emergencias 911 para dar parte a las autoridades y avisar al policía que cuida la entrada al recinto deportivo.
Después de media hora llegaron paramédicos de Cruz Ámbar y atendieron al futbolista, brindando los servicios pre hospitalarios, aunque para entonces Kevin habría caído en su primer paro cardíaco ahí en la cancha donde recibió el balonazo.
El menor de 15 años fue trasladado en estado grave al Hospital General de Tuxtepec, donde médicos y familiares confirmaron dos paros cardíacos más, para un total de 3 en un lapso de tres horas.
El último reporte de su tío de nombre Julio Morales, es que su corazón late al 50 por ciento y que las esperanzas de vida son pocas: "sigue muy delicado mi sobrino", comentó.
AGA