Para continuar con el levantamiento de censo de damnificados por el paso del huracán Otis en Guerrero, los Servidores de la Nación han tenido que adaptar campamentos para después de reunidos los datos, hacer la entrega de apoyos que pidió el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Ante la falta de hospedaje tanto en Acapulco como en Chilpancingo, los servidores de la nación han tenido la necesidad de hacer campamentos para continuar con el levantamiento del censo de damnificados.
Un grupo de los trabajadores de la nación llegó principalmente de la capital del país, la Ciudad de México, e instaló casas de campaña, colchonetas inflables y sleeping bags tanto al interior como al exterior del auditorio Sentimientos de la Nación.
Hasta hace unos días este inmueble, localizado en Chilpancingo, se fijó como el centro de cómputo del registro de los censados debido a la falta de señal de telefonía e internet en Acapulco.
Desde el viernes 27 de octubre un grupo de unos 500 servidores de la nación llegaron en caravana provenientes desde el Monumento de la Revolución y fueron recibidos por la gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, así como por la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel.
La funcionaria federal dijo que al estado de Guerrero han llegado más de dos mil servidores de la nación provenientes de todos el país para apoyar con el censo y posterior entrega de apoyos como parte del plan de Reconstrucción de Acapulco.