Este 27 de octubre se reportó un sismo de magnitud 4.7 al noreste de Unión Hidalgo, en el municipio de Oaxaca, de acuerdo al Servicio Sismológico Nacional, a través de sus redes sociales.
El movimiento telúrico fue registrado a las 12:39 horas, tuvo una profundidad de 103 kilómetros, según la dependencia.
Al comienzo, se había informado que el sismo fue de magnitud 5, no obstante, la información fue modificada por el Servicio Sismológico Nacional minutos después.
¿Hubo alerta sísmica?
El Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (Sasmex) indicó que el temblor fue detectado en tres estaciones sensoras, lo que permitió pronosticar un efecto sísmico menor en la capital del país.
Cabe señalar que el temblor “no ameritó aviso de alerta a la Ciudad de México” debido a que la intensidad no fue tan fuerte.
¿Hay riesgo de tsunami?
La Coordinación Nacional de Protección Civil recalcó que después de haber recibido el reporte, mantendrá comunicación constante con las unidades estatales y municipales para hacer una evaluación preliminar del área.
Por su parte, el Centro de Alerta de Tsunamis, de la Secretaría de Marina, indicó que no se espera la generación de variaciones del nivel del mar por la ubicación del epicentro.
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¿Qué hacer en un sismo?
- Procura mantener la calma y mantente en un lugar seguro, alejado de árboles o postes de luz.
- En caso de que estés en un piso alto y no puedes salir, ponte en la zona menos peligrosa.
- Evita correr y gritar. Esto podría alterar a las demás personas y causar accidentes.
- Quédate lejos de ventanas, espejos o muebles pesados que podrían dañarte en caso de caer.
- Dirígete hacia un punto de reunión.
¿Por qué ocurre un sismo?
Los sismos, también conocidos como terremotos, ocurren debido a la liberación repentina de energía acumulada en la Tierra. Esto generalmente se debe a la actividad en las fallas geológicas, que son fracturas en la corteza terrestre donde las rocas se han acumulado tensión durante un período de tiempo.
Cuando la tensión acumulada supera la resistencia de las rocas que la contienen, se produce una liberación repentina de energía en forma de ondas sísmicas. Estas ondas se propagan a través de la Tierra y causan el temblor característico de un sismo. La ubicación y la profundidad de la liberación de energía determinan la magnitud y la intensidad del terremoto.
Los sismos pueden tener causas naturales, como la actividad tectónica de placas, o pueden ser inducidos por la actividad humana, como la extracción de petróleo o gas, la inyección de agua en el subsuelo (fracking) o la construcción de presas. Los sismos son un fenómeno geológico común y pueden variar en magnitud y efectos, desde temblores imperceptibles hasta terremotos destructivos.
AA