La mandarina es una de las frutas más representativas del otoño en México, debido a que su producción crece durante esta temporada lo que la ha incluido en las ofrendas y otros adornos, en guisos y hasta en fragancias que representan al cuarto trimestre del año.
Su sabor dulce y ácido, así como su intenso aroma han convertido a la mandarina en una de las frutas favoritas de la temporada, su producción es ideal en México debido a la presencia de lluvias previas al crecimiento de las mandarinas y a que durante los últimos meses del año se registra la temperatura ideal para su crecimiento que oscila entre los 22 y 35 grados centígrados.
Durante algunos años, las mandarinas empiezan a cosecharse a inicios de octubre y se acaban cerca de abril del siguiente año, sin embargo, si el invierno es muy frío su cosecha termina durante el mes de diciembre.
Se dice que su mejor momento llega en noviembre, en dónde los árboles están repletos de mandarinas perfectas para comerse solas, o preparar jugo de naranja, además es el momento en el que tienen mayor resistencia.
Por este motivo, es una de las frutas que se utilizan para el adorno de ofrendas para el 1 y 2 de noviembre en México, ya que se espera que puedan estar en la ofrenda, por lo menos durante 15 días sin echarse a perder, como parte de las tradiciones del Día de Muertos.
En México su precio es más bajo durante octubre y la segunda mitad de noviembre, debido a que en la primera mitad de ese mes, el precio sube por la instalación de los altares, además a finales del penúltimo mes del año, los árboles ya producen menos mandarinas.
De acuerdo con el Gobierno de México:”la producción anual de mandarina en 2021 fue de más de 238,000 toneladas, en donde destacan los estados de Veracruz, Puebla y San Luis Potosí; siendo de octubre a febrero los meses con mayor disponibilidad”.
¿Qué propiedades tiene la mandarina?
La mandarina es rica en ácido fólico, de acuerdo con el Gobierno de México, cada 100 gramos de esta fruta aportan el 40 por ciento del que se precisa durante el día, además contiene pequeñas dosis de vitamina C, B1, B2 y B6, potasio, calcio, magnesio, hierro, zinc, fósforo,pectina, flavonoides, betacaroteno y aceites esenciales.
En las membranas e hilos blancos de los gajos se concentran grandes cantidades de fibra y hesperidina que ayuda al sistema cardiovascular.
De acuerdo con el Gobierno, entre los beneficios del consumo de mandarina están:
- Producción de sinefrina que frena la producción de colesterol en el cuerpo.
- Baja el nivel de insulina, por lo que el azúcar no se almacena ni convierte en grasas, se transforma en energía que lleva a la pérdida de peso.
- Las mandarinas tienen propiedades antimicrobianas.
- La mandarina puede ayudar en algunos casos de dermatitis.
- El aceite de mandarina es útil en el crecimiento de nuevas células y tejidos. Esto ayuda en la curación de las heridas más rápido.
En la cocina además de los gajos, también se utiliza la cáscara, el jugo e incluso las hojas en infusión, ya que se puede rallar la cáscara de la mandarina ecológica sobre ensaladas o postres.
ERV