Un operativo de la Policía Municipal de Chimalhuacán, Estado de México, terminó con una riña con escobas y armas de fuego durante el cumpleaños de la señora Graciela Ramírez, hecho que dejó a su hijo, de 33 años, y a su sobrino, de 21 años, muertos.
Los hechos se cometieron el pasado 10 de junio, fecha en la que el despliegue de más de 15 patrullas de la Policía Municipal, con uniformados que portaban armas de grueso calibre, quienes acudieron por una presunta riña familiar a un predio ubicado en el Barrio Curtidores, en el municipio de Chimalhuacán.
La cumpleañera, Graciela Ramírez, informó para TELEDIARIO que los policías actuaron sin una orden de cateo e ingresaron a su vivienda empujando a una de sus sobrinas que se disponía a ir por el pastel.
"Se metieron y ya nos empezaron a agredir. Mi hijo todavía les decía pues que se calmaran porque había muchos niños y nosotros también como mujeres (les decíamos) ‘cálmense, ¿por qué se meten’?", dijo.
De acuerdo con los afectados, las patrullas relacionadas con la agresión fueron las 109, 106, 2008, 2007, 308, TM-1004, TM-1003, TM-1005, TM-914, TM-1006, TM-916, GTM-04, así como del grupo de operaciones especiales CM-22, CM-23, CM-24, CM-29 y CM-30.
Pese al reclamo de las víctimas, los policías municipales continuaron con el operativo, por lo que los familiares utilizaron lo que tuvieron a su alcance para defenderse, como palos y piedras. A través de un video que circula en redes sociales se puede observar el momento en el que los oficiales apuntan con sus armas a los afectados, entre los que se encontraban menores de edad.
Resultado de las agresiones, diversos familiares, incluyendo mujeres y niños, resultaron heridos; sin embargo, Mario Pérez Ramírez, de 33 años, hijo de la señora Graciela, recibió cuatro disparos y murió en el hospital; mientras que su sobrino José Manuel González, de 21 años de edad, también recibió un balazo, muriendo en el lugar.
“ Yo no me di cuenta cuando le dispararon, pero ya lo vi en el piso y mi sobrino de aquel lado también ya herido, y mi hijo el chico se dio cuenta y los subió a la camioneta, y ya todos los policías al ver que salió la camioneta se vinieron, chocaron la camioneta y todavía mal heridos los bajaron y los golpearon; inclusive, todavía les aventaron balazos a la camioneta", dijo la señora Graciela.
Además, tres de los familiares que resultaron ilesos fueron detenidos por policías, pero la familia fue a buscarlos al Ministerio Público, donde se confirmó que no fueron trasladados a dicho lugar y fue hasta después de cinco horas que los liberaron en la avenida Bordo Xochiaca.
Los familiares detenidos detallaron que los policías los mantuvieron privados de su libertad y los llevaron a dar vueltas por calles del municipio mientras eran agredidos física y psicológicamente, además de que se les despojó de sus teléfonos celulares y carteras.
Al no tener motivos para presentarlos ante el Ministerio Público, los policías los abandonaron cerca del municipio de Nezahualcóyotl y los amenazaron de tener consecuencias si se presentaban a realizar la denuncia.
“Si hubiéramos hecho algún delito o algo pero no hicimos nada. Yo lo que pido es justicia, porque no es justo lo que hicieron, mi hijo dejó a siete niños huérfanos, dígame usted quién nos va a ayudar".
Hasta el momento, las autoridades de Chimalhuacán no han presentado su posición ante el caso.
KT