La infiltración del crimen organizado en los gobiernos municipales del Estado de México es un fenómeno cada vez más alarmante, como lo reveló la Operación Enjambre en el municipio de Amanalco, donde el cabildo de la administración encabezada por la alcaldesa María Elena ‘N’ entregaba hasta 100 mil pesos por cada acuerdo tomado en las sesiones del cuerpo edilicio.
De acuerdo con la información proporcionada por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), tanto la alcaldesa como el síndico, Miguel Ángel Lara, mantenían comunicación con los líderes del cártel La Familia Michoacana y pactaban acuerdos que favorecían sus intereses.
Gobierno de Amanalco pactaba reuniones con la Familia Michoacana
La investigación que involucra a la alcaldesa María Elena ‘N’ señala que las reuniones con los criminales se realizaban en lugares específicos dentro del municipio de Luvianos, lugar que les era indicado por los propios líderes del cártel.
Durante estos encuentros, se discutían temas relacionados con el rumbo de la administración municipal, pero lo único que importaba a los criminales era asegurarse de que el cabildo cumpliera con sus demandas.
Uno de los acuerdos más sorprendentes fue la exigencia de 100 mil pesos por cada resolución tomada, además de que se les entregara la mitad del presupuesto anual que recibiría el municipio. Estos pactos evidencian la fuerte influencia del crimen organizado sobre los gobiernos locales y la corrupción que permite que operen con total impunidad.
Además de estos pactos económicos, la alcaldesa también mantenía contacto con El Pelón, un supuesto líder de plaza de La Familia Michoacana en la región, a quien informaba sobre los operativos de la fiscalía, con el objetivo de evitar que fueran detenidos.
Este tipo de colaboración entre funcionarios públicos y criminales no sólo refleja la penetración del narcotráfico en las instituciones, sino que también pone en evidencia la total falta de escrúpulos de quienes deben velar por la seguridad y bienestar de los ciudadanos.
El conflicto político entre María Elena ‘N’ y Miguel Ángel Lara en Amanalco
A pesar de que el municipio de Amanalco fue ganado por la alcaldesa María Elena ‘N’ en 2021 a través del partido Movimiento Ciudadano, la relación con su síndico Miguel Ángel Lara comenzó a deteriorarse poco después del inicio de su administración.
En enero de 2022, la alcaldesa decidió cambiarse al partido Morena, lo que generó un conflicto político con el síndico, quien fue uno de sus principales opositores. Esta disputa política fue lo que aparentemente llevó a la alcaldesa a tomar medidas extremas para eliminar a su rival.
De acuerdo con la investigación, María Elena ‘N’ habría dado la instrucción de “eliminar” a Miguel Ángel Lara y a su chofer, Guillermo Jerónimo Roque, quienes fueron asesinados en enero de 2023 en un asesinato que parece haber sido orquestado por la alcaldesa y ejecutado con la colaboración de La Familia Michoacana.
“Miguel Ángel no ha querido entender, ya le dirigimos, pero si queremos seguir trabajando, tenemos que eliminarlo”, se escuchó en las conversaciones de la alcaldesa, interceptadas por las autoridades.
El mismo día de la instrucción, el vehículo en el que viajaban ambos fue encontrado con múltiples heridas de bala y signos de tortura, lo que confirma la violencia con la que se ejecutó el crimen.
Este homicidio es uno de los más recientes en una serie de asesinatos ligados al crimen organizado en la región, y pone en evidencia la disposición de la alcaldesa para recurrir al narcotráfico para resolver sus conflictos personales y políticos. Actualmente, María Elena ‘N’ enfrenta cargos por homicidio calificado y otros delitos relacionados con la organización criminal, siendo la única detenida hasta ahora por el caso de la muerte del síndico.
Operación Enjambre continúa: van por 2 alcaldesas más
El Operativo Enjambre que ha estado en marcha para desmantelar las células criminales que operan en el Estado de México ha logrado dar un golpe a la estructura de La Familia Michoacana en varias localidades.
Este operativo ha identificado a 14 funcionarios municipales que están directamente relacionados con actividades delictivas, y hasta ahora se han cumplido siete órdenes de aprehensión, entre ellas la del director de seguridad pública de Texcaltitlán, quien se suicidó antes de ser detenido. Sin embargo, aún quedan pendientes seis órdenes de aprehensión, entre ellas las de los directores de seguridad pública de Chicoloapan, Coacalco y Jilotzingo.
Asimismo, las autoridades siguen en la búsqueda de las alcaldesas María del Rosario ‘N’, de Santo Tomás de los Plátanos, y Evelia Marlem ‘N’ de Tonatico, quienes están siendo investigadas por su posible vinculación con La Familia Michoacana.
Este tipo de operaciones son fundamentales para frenar la penetración del crimen organizado en los gobiernos locales, ya que la Familia Michoacana tiene presencia en al menos 75 municipios del Estado de México. La situación en Amanalco, con la implicación directa de altos funcionarios municipales en crímenes tan graves como homicidios y extorsión, subraya la urgencia de erradicar estas prácticas y restaurar el orden en las comunidades afectadas por el narcotráfico.
AFV