Tras horas de incertidumbre y una audiencia maratónica en el Reclusorio Norte, Daniela 'N', joven originaria de Guadalajara detenida durante la marcha de la "Generación Z" en la Ciudad de México, recuperó su libertad.
Sin embargo, su salida estuvo marcada por las secuelas físicas y emocionales de lo que su defensa califica como un trato brutal por parte de la policía capitalina; teniendo que salir del lugar en una silla de ruedas.
¿Cómo se dio la detención de Daniela y las agresiones en su contra?
Los hechos se remontan al pasado sábado, cuando Daniela acudió a la manifestación con la intención de documentar el evento. Según testimonios y videos presentados por su defensa, lejos de participar en los disturbios, la joven intentó disuadir a otros manifestantes de arrojar piedras a los uniformados, gritando consignas de unidad como "todos somos mexicanos".
A pesar de las intensiones de no promover la violencia, Daniela fue detenida junto con otras siete personas y trasladada bajo fuertes acusaciones.
La audiencia inicial, que se prolongó hasta cerca de las tres de la mañana del miércoles, culminó con una reclasificación de delitos crucial para su liberación. Aunque inicialmente se hablaba de tentativa de homicidio, el juez determinó vincularlos a proceso por resistencia de particulares. Esto permitió que los ocho detenidos enfrenten su juicio en libertad.
¿Qué determinaciones legales se tomaron para Daniela?
Sin embargo, el caso de la tapatía fue distinto al del resto. Daniela fue la última en salir y presentó lesiones visibles en su cuerpo, producto del sometimiento policial.
Debido a su estado de salud y a que reside en Guadalajara, el juez le otorgó el beneficio de acudir a firmar cada dos meses, a diferencia de sus compañeros que deberán hacerlo mensualmente. Además, tienen prohibido acercarse al Zócalo y a las víctimas.
Al salir, las palabras de Daniela reflejaron el terror vivido: "Yo sí pensé que mi vida en un momento corrió peligro, pero gracias a Dios estoy aquí afuera".
Su abogado, Ricardo Rosales, adelantó que la joven busca interponer una denuncia formal por el abuso de autoridad, ya que cuenta con evidencia de que ella buscaba pacificar la situación.
Mientras la Policía de la Ciudad de México ha iniciado una investigación interna para determinar si hubo uso excesivo de la fuerza, Daniela regresará a Jalisco para recuperarse de las lesiones, con la obligación legal de volver a la capital cada bimestre hasta que se dicte una sentencia definitiva.
LG