Una madre y su hijo de cuatro años fueron arrastrados por la crecida repentina de las aguas del río Coatán en Tapachula, Chiapas, la tarde del viernes 17 de mayo. La búsqueda de los cuerpos terminó el sábado 18 al mediodía, cuando los equipos de rescate localizaron los cuerpos sin vida aproximadamente tres kilómetros río abajo de donde fueron arrastrados.
La Secretaría de Protección Civil Municipal, en coordinación con diversos cuerpos de rescate y emergencia, desplegó esfuerzos para encontrar a los desaparecidos, enfrentándose a la furia del río.
Según relatos de familiares, la madre y su pequeño hijo habían salido a refrescarse en las aguas del río Coatán cuando una crecida sorpresiva los arrastró, dejándolos sin posibilidad de sobrevivir.
¿Cómo protegerse de la crecida de los ríos?
Este lamentable incidente sirve como un recordatorio de la rapidez con la que pueden cambiar las condiciones en los cuerpos de agua, especialmente durante la temporada de lluvias.
Para evitar tragedias similares, las autoridades y expertos en seguridad ofrecen algunas recomendaciones clave. Esto es lo que debes prevenir cuando acudas a ríos:
- Conocer el entorno: Antes de adentrarse en cualquier cuerpo de agua, es fundamental familiarizarse con el entorno, incluyendo las condiciones climáticas, la topografía y los posibles riesgos.
- Estar alerta: Mantenerse atento a cualquier señal de cambios repentinos en el nivel del agua, corrientes fuertes o cambios en el clima. Las crecidas pueden ocurrir en cuestión de minutos, sin previo aviso.
- No subestimar el poder del agua: Aunque un río pueda parecer tranquilo en la superficie, su corriente subyacente puede ser engañosa y extremadamente peligrosa, especialmente durante la temporada de lluvias. Siempre pregunta si un río tiene corrientes subterráneas.
- Tomar precauciones con los niños: Supervisar de cerca a los niños en todo momento y asegurarse de que usen chalecos salvavidas apropiados a su tamaño cuando estén cerca del agua.
- Evitar nadar en áreas desconocidas: Es preferible evitar nadar en ríos o cuerpos de agua desconocidos, ya que es difícil predecir las condiciones y los peligros potenciales. ¡No te arriesgues!
- Comunicación y planificación: Siempre informar a alguien sobre los planes para realizar actividades cerca del agua y establecer un plan de acción en caso de emergencia.
KAT