De manera sigilosa un individuo logró entrar a la habitación de su prima, donde aprovechó que dormía para hacerle tocamientos obscenos en su cuerpo, situación que hoy le mantiene internado en módulos de prisión.
Lo anterior se registró la mañana del lunes en un domicilio del ejido Valle de Eureka del municipio de Gómez Palacio, Durango, según informes proporcionados por personal de la Dirección de Seguridad Pública Municipal y Protección Ciudadana, que acudieron al llamado de auxilio.
La afectada de 26 años de edad indicó señaló directamente a su primo como presunto responsable de hacerla objeto de tocamientos, por lo que despertó sobresaltada provocando que el agresor se diera a la fuga.
Los efectivos de la dependencia policíaca buscaron en las cercanías y lograron la aprehensión de Benjamín al que trasladaron a la ergástula municipal, donde lo turnaron al Agente Investigador del Ministerio Público de la Vicefiscalía de la Región Laguna para que determine su situación jurídica.
¿Cómo se castiga el abuso sexual en México?
En México, el abuso sexual se considera un delito y está penado por la ley. Las sentencias por abuso sexual pueden variar dependiendo de diversos factores, como la edad de la víctima, el grado de violencia utilizado, el uso de amenazas, la relación entre la víctima y el agresor, entre otros.
En términos generales, las sentencias por abuso sexual en México pueden ser las siguientes:
- Prisión preventiva: Esto significa que el acusado es detenido mientras se lleva a cabo el proceso penal.
- Multa: En algunos casos, el acusado puede ser sancionado con una multa económica.
- Pena privativa de libertad: Si el acusado es encontrado culpable, puede ser condenado a una pena de prisión, que puede ir de 6 meses a varios años, dependiendo de la gravedad del delito.
- Tratamiento psicológico: En algunos casos, el juez puede ordenar que el acusado reciba tratamiento psicológico para evitar que vuelva a cometer un delito similar.
Es importante destacar que el abuso sexual es un delito grave y puede tener consecuencias muy serias para la víctima y para el agresor.