El hombre que presuntamente habría asesinado a su propio padre en el municipio de Santa Catarina fue vinculado a proceso por el delito de parricidio.
Edgar Guadalupe, de 25 años de edad, fue detenido el pasado 24 de noviembre por ser el principal sospechoso de la muerte de José Guadalupe, de 54 años y padre de Edgar, el pasado 21 de noviembre.
Aquella fatídica jornada, Edgar y su padre José Guadalupe se encontraban al interior de la casa ubicada sobre la calle Cataluña, en la colonia Viñedos de Santa Catarina.
Edgar dormía plácidamente cuando su padre lo despertó de forma brusca y le gritó que se levantara para ir a trabajar.
Con el paso de los minutos, Edgar se levantó, pero observó que su padre se encontraba con varios amigos, por lo que lo confrontó y le expresó que estaba harto de trabajar para él y recibir maltratos.
A decir de las primeras indagatorias, José Guadalupe, furioso por la confrontación de su hijo, lo golpeó con la mano, motivo por el cual presuntamente Edgar tomó una pala que se encontraba cerca y golpeó a su padre en la cabeza hasta dejarlo inconsciente.
Acto seguido, el joven huyó del sitio, en tanto que autoridades y cuerpos de rescate que llegaron al lugar de los hechos confirmaron el deceso de José Guadalupe.
La autopsia reveló que la causa de muerte fue una contusión profunda de cráneo.
Derivado de las investigaciones, Edgar fue detenido tres días después de la discusión con su padre y tras la audiencia recibe la vinculación a proceso. El hombre continuará el proceso en prisión preventiva oficiosa en el Penal de Apodaca.
¿Qué es el parricidio?
El parricidio es un término legal que se refiere al acto de matar a uno o ambos padres. Este crimen específico implica el homicidio intencional de uno o ambos progenitores por parte de un hijo o hija biológico/a. El término también se puede aplicar cuando la víctima es un padrastro o madrastra, pero generalmente se refiere al asesinato de los padres biológicos.
El parricidio es considerado un delito grave en la mayoría de los sistemas legales, y las penas asociadas con este crimen suelen ser severas debido a la violación de las relaciones familiares y la gravedad del acto. La motivación detrás del parricidio puede variar y puede involucrar factores emocionales, psicológicos o incluso financieros.
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