Brigadistas de Protección Civil y CONAFOR, lograron apagar el incendio en un cien por ciento la tarde de este martes, el cual llevaba cinco días en llamas luego de que una tormenta eléctrica cayera sobre los ejidos Rancho Viejo y Cuevas en el municipio de Iturbide, Nuevo León.
El fuego complicó el acceso terrestre para los grupos que acudieron al lugar, por lo que se pidió el apoyo vía aérea, y de esta manera un helicóptero del Gobierno del Estado realizó descargas en las zonas calientes.
El siniestro logró controlarse gracias a más de 65 elementos que unieron sus fuerzas para sofocar las llamas.
Erik Cavazos Cavazos, director de Protección Civil Nuevo León junto con personal de CONAFOR inspeccionaron el lugar para conocer las condiciones de control, señalando que obtuvieron los resultados esperados en su totalidad.
"Realizamos un proceso de inspección en la zona observando un control del 100% afectando principalmente matorral bajo, afortunadamente sin personas lesionadas ni necesidad de evacuar a ningún habitante de la zona", informó.
Personal de CONAFOR, señaló que, debido a este suceso, las afectaciones de las áreas naturales son más de 20 hectáreas.
"La cifra oficial de afectación es de 23.5 hectáreas considerando este incendio forestal tipo superficial", señaló.
Pese a que el suceso parece estar controlado, las autoridades señalaron que llevarán un proceso de vigilancia hasta que el fuego sea eliminado completamente.
Entre los elementos que acudieron al lugar durante los cinco días desde que se propició el incendio, se encuentran: Brigada Fénix PCNL, Protección Civil Iturbide, Brigada rural CONAFOR, Protección Civil Montemorelos, Protección Civil Galeana, Protección Civil Allende, Protección Civil Doctor Arroyo, Servicios Ambientales, Protección Civil Terán y Agua y Drenaje.
ases