Fue el 20 de febrero cuando Gustavo Carrillo fue víctima de una bala perdida en una riña registrada en la colonia San Isidro de Lerdo.
El afectado comenta que mientras se encontraba en casa de su madre retirando una maquinaria de herrería una bala lo impactó en el abdomen, herida que le provocó la perforación del intestino.
Hasta la fecha, Gustavo ha pasado por una cirugía y diversas consultas médicas, además requiere una dieta especial, sin embargo, todo se complica ya que por la lesión no ha podido trabajar.
Ya interpuso denuncia en la fiscalía
La denuncia ya fue interpuesta en la Vicefiscalía General del Estado de Durango y el supuesto agresor sigue sin pagar por los daños, por lo que el afectado pide justicia a las autoridades.
La víctima lejos de querer prisión para su agresor pide una indemnización pues asegura que su vida cambió por completo desde el día del accidente por lo que ahora será difícil para el trabajar como antes lo hacía.