Un ex capitán de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) fue asesinado a balazos durante la noche del 24 de octubre sobre la Av. López Mateos, al cruce con Aldama, en la colonia San Agustín, del municipio de Tlajomulco de Zúñiga.
Elementos de la Sedena y de la Guardia Nacional se trasladaron hasta el lugar de los hechos tras los reportes de los ciudadanos que escucharon varios disparos de arma de fuego afuera de una tienda de autoservicio y una gasolinera.
La víctima se encontraba en compañía de un joven, tomando un café, cuando de pronto llegaron dos sujetos con cascos en color negro y otro verde, a bordo de una motocicleta, y sin mediar palabra, sacaron el arma y dispararon, a pesar de que el hombre intentó repeler la agresión, recibió los balazos.
El cuerpo quedó inerte, en medio de las bombas de la gasolinera, cuando llegaron los paramédicos, quienes confirmaron que éste ya no contaba con vida, ya que tenía tres disparos en tórax y uno en el cráneo con entrada y salida.
Cuando llegó la policía, el joven, quien dijo ser sobrino del asesinado, indicó que éste había sido capitán de la Sedena, por lo que este delito generó una gran movilización en el lugar.
Agentes de la Fiscalía de Jalisco llevan a cabo las investigaciones correspondientes.
Esta noticia es alarmante y trágica, ya que un ex capitán de la Sedena fue asesinado en un ataque violento. Este tipo de incidentes reflejan la creciente inseguridad en algunas áreas del país, además de que plantea preguntas sobre la protección de aquellos que han servido en instituciones de seguridad.
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La brutalidad del ataque, con múltiples disparos y la presencia de agresores encapuchados, es un recordatorio escalofriante de los riesgos que enfrentan no sólo los miembros activos de las fuerzas armadas, sino también a aquellos que han dejado el servicio.
Repercusiones en la percepción sobre la seguridad
Además, la respuesta rápida de las autoridades, incluida la Sedena y la Guardia Nacional, es un indicativo de la gravedad del crimen, pero también resalta la necesidad urgente de medidas más efectivas para abordar la violencia y el crimen organizado. La implicación de un ex miembro de la Sedena en este caso podría tener repercusiones más amplias en la percepción pública sobre la seguridad y la confianza en las instituciones.
Este asesinato también destaca la importancia de continuar las investigaciones de manera exhaustiva para llevar a los responsables ante la justicia, así como para desentrañar las razones detrás de estos ataques y cómo prevenir futuros incidentes similares.
AA