Un presunto multihomicida fue detenido por elementos de Fuerza Civil en el municipio de Santa Catarina.
La detención se realizó al exterior de un domicilio ubicado sobre la calle Lomas Modelo, en la colonia Lomas de la Fama, luego de que oficiales observaran al hombre quien mostró una actitud evasiva y al abordarlo comenzó a huir.
Sin embargo, lograron alcanzar a Alan “N”, de 31 años a quien tras una revisión le encontraron un arma corta abastecida con ocho balas, 52 dosis de cristal, una mochila, dinero en efectivo, dos celulares y una báscula digital.
Derivado de los datos obtenidos del área de inteligencia del Grupo de Coordinación para Seguridad de Nuevo León integrado por el Ejército Mexicano, Guardia Nacional, Fiscalías Generales de la República y del Estado, Fuerza Civil y Policías Municipales, se informó que el hombre presuntamente fue autor material de un multihomicidio ocurrido en Santa Catarina el 29 de octubre, durante un festejo religioso.
Por lo que fue puesto a disposición de la autoridad correspondiente.
¿Qué implica el homicidio calificado?
El homicidio calificado es una forma de homicidio que implica circunstancias agravantes especiales que hacen que el crimen sea considerado más grave que un homicidio simple. Las circunstancias que califican el homicidio varían según la jurisdicción, pero algunas comunes incluyen:
Premeditación: Se refiere a la planificación previa al acto homicida. Si el acusado ha planeado conscientemente y deliberadamente cometer el asesinato, esto puede considerarse un agravante.
Alevosía: Implica la comisión del homicidio de una manera que garantiza la muerte de la víctima sin darle la oportunidad de defenderse. Por ejemplo, un ataque sorpresa o una emboscada.
Atrocidad o ensañamiento: Si el asesinato se comete de manera particularmente brutal, cruel o inhumana, podría considerarse calificado. Esto puede incluir la infligencia de sufrimientos adicionales a la víctima después de la muerte.
Motivos específicos: Algunas jurisdicciones consideran calificado el homicidio si se comete por motivos específicos, como el lucro, el odio racial o la pertenencia a una pandilla.
Agravantes adicionales: Pueden incluir el uso de armas peligrosas, la muerte de un testigo para evitar que testifique en un juicio, o el asesinato de un funcionario público, como un policía.
La penalización por homicidio calificado es generalmente más severa que la del homicidio simple. En muchos sistemas legales, puede resultar en una condena a cadena perpetua o incluso en la pena de muerte, dependiendo de la jurisdicción y las leyes específicas aplicables.
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