Este domingo se reanudaron las labores de diversas corporaciones de auxilio para recuperar el cuerpo de un joven que murió ahogado en el río Ramos en el municipio de Allende, Nuevo León.
Fue poco antes de las 8:00 horas que comenzaron los trabajos para ubicar el cadáver de Jesús Daniel Leandro Hernández, de 26 años, originario de Veracruz, quien murió durante la tarde del sábado 16 de septiembre.
Protección Civil de Nuevo León y Allende, así como la Cruz Roja Mexicana y elementos de policía municipal coordinaron acciones para recuperar el cuerpo de Jesús Daniel, que cayó a una profundidad de tres metros.
¿Cómo ocurrió el accidente?
Según trascendió, Jesús Daniel se encontraba en compañía de tres compañeros del trabajo, con quienes acudió al río Ramos para disfrutar del asueto.
De acuerdo con lo informado por sus conocidos, todos se encontraban lanzándose al cauce del río, sin embargo, en una de esas ocasiones, uno ya no logró salir del agua.
Daniel vestía un short amarillo y playera deportiva.
El área fue acordonada pues elementos de Protección Civil se encontraban realizando los trabajos de rescate, ya que se tienen que utilizar buzos para localizar el cuerpo del joven.
Qué hacer en caso de un ahogamiento por agua
- Rescatar a la persona del agua: Si es seguro hacerlo, trata de sacar a la persona del agua rápidamente.
- Mantén la calma y pide ayuda: Llama a los servicios de emergencia, como los bomberos o socorristas, y solicita ayuda adicional de otras personas en la zona.
- Posición de la víctima: Al sacar a la víctima del agua, asegúrate de que su cabeza, cuello y columna estén alineados. Luego, colócala boca arriba en un lugar seguro.
- Verifica la respiración: Observa si el pecho de la víctima se infla para determinar si está respirando. También puedes acercar tu mejilla a su boca para sentir si hay alguna señal de respiración.
- Si la persona respira: Si la víctima está respirando normalmente, colócala en posición lateral para evitar que se asfixie si vomita.
- Si la persona no respira y no tiene pulso: Inicia la reanimación cardiopulmonar (RCP) básica. Coloca ambas manos en el centro del pecho (esternón) y presiona con fuerza a un ritmo de dos compresiones por segundo. Esto ayuda a expulsar el agua de las vías respiratorias y a mantener el flujo sanguíneo. Continúa haciendo RCP hasta que llegue ayuda médica.
- Respiración boca a boca: Después de cada ciclo de RCP (cada 20 compresiones), inclina la cabeza de la víctima hacia atrás, levanta su mentón y realiza respiración boca a boca para ayudar a inflar el pecho.
- Si la víctima no reacciona: Realiza dos ciclos completos de RCP (masaje cardíaco y respiración boca a boca) durante un minuto y luego pide ayuda nuevamente. Continúa con estas técnicas de primeros auxilios hasta que lleguen los profesionales de salvamento.
mvls