En las últimas horas la violencia generada en la denominada Zona Laja – Bajío ha dejado siete personas sin vida, entre ellas una mujer. Pasada la medianoche de este miércoles, los cuerpos de dos personas fueron colgados del puente de la comunidad de Rincón de Tamayo, según confirmaron autoridades municipales.
De acuerdo a informes de habitantes de la zona alrededor de la medianoche sujetos no identificados colgaron los cadáveres de dos hombres semidesnudos. Un cuerpo fue colgado del cuello y otro de los pies para que fueran observados por las personas que entrenan a la comunidad más poblada de Celaya que se localiza en la carretera a Salvatierra.
Montan operativo policias municipales
De inmediato llegaron policías municipales tras montar un operativo ya que en esa zona varios agentes han sido víctimas de ataques armados. Más tarde arribaron agentes de la Fiscalía de Guanajuato para descolgar los cuerpos, que hasta ayer permanecían como desconocidos, y trasladarlos a sus instalaciones.
Hasta ayer también se desconocía el móvil del crimen, aunque autoridades ya indagaban si tiene relación con otros casos similares como el registrado el pasado 29 de julio en el mismo lugar donde dejaron otros dos cadáveres.
Ejecutan a 4 hombres y una mujer en una recicladora
En otro hecho diferente, una mujer y cuatro hombres fueron ejecutados dentro de una recicladora por sujetos armados que dejaron una persona herida. Los hechos se registraron en la comunidad de San Antonio de Calichar en el Municipio de Apaseo el Alto en los límites con Querétaro.
El sistema de emergencias recibió una llamada que reportaba detonaciones de arma de fuego en contra de algunas personas en un lugar de reciclaje en conocido como Los Cholos. Policías se desplazaron a la escena y localizaron a seis personas, cinco ya estaban muertas, uno más fue trasladado, en estado grave, a una clínica hospitalaria.
Agentes investigadores revelaron que el ataque fue directo, aunque aún se desconocía el móvil del ataque. La Fiscalía del Estado de Guanajuato, inició una carpeta de investigación y trasladaron los cuerpos de las personas fallecidas a Guanajuato Capital y realizar la necropsia de ley.
Los fallecidos permanecían como desconocidos, aunque vecinos revelaron a las autoridades que eran ordinarios de Michoacán y vivían ahí mismo desde hace varios meses.
Ello se suma al contexto de violencia por el que atraviesa el estado de Guanajuato, el cual se ha posicionado desde hace varios años como la entidad de la república con mayor número de homicidios dolosos, sumando a otro tipo de delitos que han ido en aumento.