Mónica Montaño Reyes, Coordinadora del Observatorio de Procesos Políticos y Electorales CUCSH abordó el aumento de la violencia política en Jalisco, y argumentó que este proceso electoral reveló la debilidad del Estado de Jalisco ante los grupos del crimen organizado por la disputa de control en el territorio.
En lo que va del proceso se tiene registro de tres candidatos asesinados, se trata de Álvaro Madera López, candidato por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) a la alcaldía de Mezquitic, el pasado 1 de marzo; Analuci Martínez Saldivar, candidata por el Partido Acción Nacional (PAN) a la presidencia de Cuquío, el pasado 2 de marzo; y Carlos Alfredo Sevilla Cuevas, alcalde con licencia de Casimiro Castillo quien buscaba la reelección por el Partido Movimiento Ciudadano (MC), asesinado el 11 de marzo.
A nivel nacional Integralia consultores contabilizó 35 candidatas y candidatos asesinados, de esa cantidad 21 son mujeres.
Por su parte el cuarto informe publicado por Etellekt, puntualizó que en total fueron 782 agresiones las que se reportaron contra los aspirantes en el periodo del 07 de septiembre al 30 de mayo, sumando 89 políticos adicionales a los 35 aspirantes para esta elección popular que también fueron asesinados, como fue el caso del ex gobernador de Jalisco, Aristoteles Sandoval.
Montaño Reyes, dijo que la mayor cantidad de notas publicadas por los medios de comunicación en torno a los aspirantes a un puesto de elección popular se centraron en las declinaciones de candidaturas por las amenazas recibidas de los grupos criminales al ser amedrentados.
Añadió que en este proceso electoral, se vio una falta de estrategia por parte de los tres niveles de gobierno en materia de seguridad.