Claudia Sheinbaum, la primera mujer en ser votada para dirigir la Ciudad de México, cumple este 5 de diciembre tres años de haber rendido protesta ante el Congreso capitalino como jefa de Gobierno.
La caída de la Línea 12 del Metro, la pandemia del covid-19, las marchas feministas y su probable candidatura en las elecciones presidenciales de 2024 han marcado la gestión de quien se ha definido en distintas ocasiones como una mujer exigente, de izquierda y feminista.
Sheinbaum no es la primera mujer en gobernar la capital del país, por donde circulan diariamente más de 20 millones de personas, - Rosario Robles lo hizo de forma interina entre 1999 y 2000-, pero sí es la primera que llegó al cargo a través del voto popular.
Es una de las políticas más cercanas al Presidente y de las figuras más fuertes del morenismo para contender por la Presidencia de la República en 2024, respaldo que se materializó el 5 de julio de este año cuando el propio Andrés Manuel López Obrador la ‘destapó’ en su conferencia matutina junto con el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard; el embajador de México ante la ONU, Juan Ramón de la Fuente; el embajador en Estados Unidos, Esteban Moctezuma; y las secretarias de Economía y de Energía, Tatiana Clouthier y Rocío Nahle.
Fiel a su sobriedad y cautela, Sheinbaum evita hablar abierta y claramente de sus aspiraciones políticas, limitándose a agradecer la confianza del Presidente durante tantos años.
Nobel de la Paz
Sheinbaum estudió Física en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y tiene una maestría y un doctorado en Ingeniería Energética por esa misma casa de estudios, aunque hizo su investigación en el Lawrence Berkeley National Laboratory. Cuenta con ocho cursos y talleres sobre energía y cambio climático en las universidades de Stanford y Berkeley, Estados Unidos.
Integró el Panel Intergubernamental de expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de la Organización de las Naciones Unidas, grupo que ganó el Nobel de la Paz en 2007.
Fue esta formación la que le valió ser secretaria de Medio Ambiente de la administración de López Obrador cuando éste fue alcalde la ciudad en 2000 y 12 años después, cuando AMLO buscó nuevamente la presidencia de México, fue propuesta como titular de la Semarnat.
En 2014, Sheinbaum fue de las primeras políticas en renunciar a las filas del PRD (Partido de la Revolución Democrática) y unirse al partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), bandera bajo la que ganó la jefatura delegacional de Tlalpan.
Ya como candidata a jefa de Gobierno, la morenista fue señalada como responsable del colapso del colegio Rébsamen en Tlalpan, durante el terremoto de septiembre de 2017, en el que murieron 19 niños y 7 adultos.
Se le acusó de omisiones en materia de Protección Civil, pues fueron funcionarios a su cargo quienes aprobaron permisos irregulares de construcción.
Sheinbaum negó las acusaciones y aseguró que las mismas tenían fines políticos. En julio de 2018 la Procuraduría General de Justicia deslindó de toda responsabilidad a la recién electa jefa de Gobierno.
Ese mismo año fue reconocida por la BBC como una de las 100 mujeres más inspiradoras e influyentes de todo el mundo.
- Política
Personalidad
Una de las mayores críticas que recibe la jefa de Gobierno desde la oposición y en redes sociales es su “falta de sensibilidad”, algo que no le quita el sueño.
“Me preocupa el trabajo, no la imagen. Yo sé que hice lo que tenía que hacer”, dijo recientemente a El País cuando fue interrogada sobre la “indiferencia” que suele mostrar ante casos como el colapso del tramo elevado de la Línea 12 del Metro.
“Yo soy muy exigente. La frase que más escuchan de mí es que aquí no hay autocomplacencias”, dijo en esa misma entrevista.
Es defensora de los derechos reproductivos de la mujer y se reconoce abiertamente como feminista, aunque es crítica de los actos violentos registrados en las marchas de mujeres.
Cautelosa con sus palabras, pero firme con sus decisiones, la jefa de Gobierno ha reconocido que en la capital del país operan carteles de la delincuencia organizada y que los femicidios y violaciones han subido, pero se mantiene en combatir la delincuencia con una estrategia similar a la que adoptó López Obrador durante sus años a cargo de la capital: con un mando único.
“Hasta hoy las 16 alcaldías siguen teniendo sus Gabinetes de Seguridad y así va a seguir siendo”, dijo apenas en septiembre.
A sus 59 años, Sheinbaum encara la segunda parte de su mandato con los estragos del colapso de la Línea 12 del Metro, un sistema de transporte colectivo que parece ya no ser suficiente para los capitalinos, un aumento en la cifra negra de la incidencia delictiva y una ciudad dividida en dos (con nueve alcaldes opositores a Morena).
KT