Diputados locales y federales pidieron al Gobierno de Nuevo León transparentar los recursos del impuesto verde luego de que Érik Arévalo Gil, presidente de la Asociación de Concreteros en el estado, reveló que ha impactado en las empresas del sector en 30 por ciento.
Waldo Fernández, coordinador de Morena en el Congreso local, indicó que lo que pasó con el impuesto verde es que la industria ahora tiene una licencia para contaminar y le trasladan el precio de la producción al consumidor.
“El impuesto verde es una licencia para contaminar, y realmente el problema viene desde el primer Presupuesto que se votó, porque el Congreso en ese momento le dio un cheque en blanco al Gobierno. Era el Gobierno que iba entrando, pensando que iban a destinar este dinero de manera transparente para combatir la contaminación y mejorar los procesos de las empresas, y no sabemos dónde terminó el dinero.”
“Nadie ha mejorado sus procesos extractivos para mejorar la contaminación. Pedimos que el dinero se utilice para que las empresas del ramo mejoren sus procesos productivos, para que el día de mañana les quiten este impuesto. Es mejor tener una empresa que no contamina a diferencia de tener mucho dinero, pero con más contaminación. Pedimos que se transparente”, explicó Fernández.
Sandra Pámanes, vicecoordinadora de Movimiento Ciudadano, dijo que este gravamen fue creado para mejorar la calidad del aire y subrayó que el bienestar de los habitantes debe estar por encima de cualquier situación.
“En un tiempo se convirtió en un problema muy serio la manera en que estaban actuando y había que meter alguna especie de incentivo para generar un orden en las empresas, como pasa con las concretaras, por llamarlas de una manera. Es una medida que complementa todas las demás acciones que debe llevar a cabo el Estado para mejorar la calidad del aire y poner un orden en ese tipo de empresas.”
“Creo que poco a poco se puede ir tomando con más tranquilidad este tema, resolver el problema de la contaminación en nuestro estado, y de ahora en adelante pensar incluso en una reducción en este impuesto, siempre y cuando todos en este sentido podamos aportar lo que mejor nos corresponda para mejorar el medio ambiente de nuestro estado”, señaló.
Por su parte, José Luis Garza Ochoa, dirigente estatal del PRI y diputado federal, dijo que presuntamente lo recaudado por este impuesto es para la campaña de Félix Arratia, ex secretario de Medio Ambiente estatal, y actual precandidato de MC a la alcaldía de Juárez.
“No tenga la menor duda que es con fines electoreros y de recaudación, porque ahora el que era titular precisamente del área de Medio Ambiente lo tienen de candidato (de Juárez), que además lo van a barrer, como va a pasar con todo Movimiento Ciudadano. Y hoy sus candidatos, quienes eran funcionarios del Gobierno, los tienen de candidatos, y no tengamos la menor duda que ese impuesto verde fue única y exclusivamente para hacerle llegar más recursos al Estado.”
“No sabemos en qué se ha utilizado, porque en el tema particularmente del medio ambiente hoy es gravísimo lo que nuestros niños y adultos están sufriendo por el problema ambiental. Es importante decirles que este gobernador, de manera sistemática, y su Gobierno y su partido violan la ley, y aquí nosotros vamos a enseñarles a que la ley en Nuevo León se respeta”, afirmó.
Por último, Annia Gómez, legisladora federal del PAN, consideró urgente que se transparente el impuesto verde, pues al día de hoy hay muy mala calidad del aire cerca de algunas empresas.
“Pareciera que todo eso va a una sola bolsa y es electoral, de campaña, y sí se tiene que estar transparentando”, indicó.
¿Qué es el impuesto verde?
El impuesto verde es un tipo de tributo que se aplica a actividades, productos o servicios que generan impactos negativos en el medio ambiente. Su objetivo principal es incentivar comportamientos más sostenibles y fomentar la adopción de prácticas empresariales y de consumo amigables con el medio ambiente.
En el contexto de la contaminación industrial. el impuesto verde busca desincentivar la emisión de contaminantes al medio ambiente. En lugar de simplemente penalizar a las empresas con multas, se les impone un impuesto sobre la contaminación que generan. Esto crea un incentivo económico para que adopten tecnologías más limpias, implementen procesos de producción más sostenibles o inviertan en medidas para reducir su huella ambiental.
mvls