Las investigaciones de tesis de los aspirantes presidenciales de la 4T revelan sus respectivos intereses de juventud. Mientras Claudia Sheinbaum estudiaba la eficiencia energética y el uso de estufas de leña en zonas rurales, Marcelo Ebrard escribía sobre el equilibrio de poderes bajo la hegemonía del PRI, proponiendo devolverle peso como ámbito de resolución de conflictos. Adán Augusto López y Ricardo Monreal coincidieron en analizar el tema del federalismo.
El petista Gerardo Fernández Noroña investigó sobre el movimiento obrero y el verde Manuel Velasco concluyó sus estudios en Derecho en una universidad que ofrece titulaciones sin necesidad de presentar tesis.
Sheinbaum y Monreal les han dado continuidad a sus investigaciones científicas, en el primer caso, y a sus reflexiones personales, en el segundo, en libros y artículos publicados. Ebrard y Fernández solo han firmado un texto cada uno, el primero para mostrarse presidenciable y el segundo, para denunciar al ex presidente Enrique Peña Nieto. López y Velasco no han iluminado el mundo con algún volumen de su pensamiento.
Si la candidatura presidencial de Morena fuera definida por méritos académicos, la doctora Sheinbaum evaporaría con una ecuación termodinámica a sus cinco contendientes. Por detrás en términos de publicaciones, vendría el doctor Monreal, y más allá, el especialista Ebrard y el maestro Adán Augusto. Con su tesis, el licenciado Fernández quedaría por delante de Manuel Velasco.
Sheinbaum: eficiencia energética
Claudia Sheinbaum ha obtenido cédulas profesionales por cada uno de sus grados académicos: la 1427852 por la Licenciatura en Física en 1989, la 2007889 por la Maestría en Ingeniería Energética en 1994, y la 2102063 por el Doctorado en Ingeniería, en 1995. Todas sus investigaciones de tesis –en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)– se enfocan en descubrir cómo sacarle mayor provecho a la energía (“Estudio termodinámico de una estufa doméstica de leña para uso rural”, de 1988; “Economía del uso eficiente de la energía eléctrica en la iluminación”, de 1990; y “Tendencias y perspectivas de la energía residencial en México. Análisis comparativo con las experiencias de eficiencia y conservación de los países de la OCDE”, de 1994).
Más recientemente y en clave electoral, ha explicado que realizó estos trabajos pensando en aplicaciones materiales útiles para las personas menos privilegiadas. En un tweet del 12 de junio, por ejemplo, afirma que investigó el “desarrollo de estufas eficientes de leña” para “mejorar la vida y salud de las mujeres”. Y conectó lo anterior con su actividad en la administración pública: “Hoy, como jefa de Gobierno, he impulsado un programa de estufas agroecológicas para el ahorro de leña”.
La temática de su más de un centenar de publicaciones en revistas indexadas se extiende al campo medioambiental, como la mitigación de las emisiones de carbono que provocan el calentamiento global y el desarrollo sostenible.
Monreal: federalismo incumplido
Con 18 títulos, Ricardo Monreal excede con largueza a cualquiera de sus rivales. Lo mismo firma libros sobre la actualidad de China, la delegación (hoy alcaldía) Cuauhtémoc y la historia de Zacatecas que, sobre los escuadrones de la muerte, la filantropía, el acceso de las mujeres a la justicia y el sistema financiero mexicano.
Para acreditar la Licenciatura en Derecho por la Universidad Autónoma de Zacatecas, en 1982 (cédula 0763139 de ese mismo año), realizó el trabajo “Juicio de privación de derechos agrarios y nuevas adjudicaciones”. En su currículum no menciona haber aprobado la maestría en Derecho Constitucional y Administrativo con alguna tesis (tampoco se encuentra la cédula correspondiente en el Registro Nacional de Profesionistas), pero sí el doctorado en el mismo tema (cédula 3810757 de 2003) y también en la UNAM, que registró en 2002. Con el título “Origen, evolución y perspectivas del federalismo mexicano”, critica que en materia fiscal el federalismo mexicano es más bien centralista, por lo que le parece indispensable renovarlo.
Según explica en la presentación del trabajo, se basó en un “conjunto de investigaciones hemerográficas y en diversos archivos históricos nacionales que he desarrollado al paso de muchos años, como resultado de la inquietud que despertó el tema del federalismo en mi persona”.
Su asesor de tesis fue el doctor Juan José Mateos Santillán, un académico de la Facultad de Derecho de la UNAM especializado en la independencia de México y la guerra con Estados Unidos, aunque con una variedad de intereses similar a la de su tutelado: además de la del federalismo, ha conducido tesis sobre temas como seguridad pública y política criminal, comunicación política, quejas administrativas en materia electoral y justicia indígena local. Mateos Santillán ha fungido como representante de su antiguo alumno en foros como la Conferencia Nacional de Gobernadores.
Adán Augusto: Estado Federal
En tercera posición en grados académicos, se encuentra Adán Augusto López, en cuyo currículum se afirma que estudió la Licenciatura en Derecho en la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco de 1979 a 1984 (cédula 1315270), y se tituló con la tesis “El Estado Federal Mexicano”, obteniendo Mención Honorífica. A pesar de la distinción, el trabajo no aparece en el repositorio institucional de la UJAT, ri.ujat.mx.
En semblanzas en varias páginas de gobierno, se indica que “tiene estudios en derecho comparado por el Instituto de Derecho Comparado de París” (univ-droit.fr) y que es maestro en Ciencias Políticas por la Universidad de París II (Pantheón-Assas, www.u-paris2.fr), aunque en otras se dice que por la de París III (Sorbonne Nouvelle, www.univ-paris3.fr/). Solamente en la página de esta última se hallaron referencias a alumnos de apellido López, pero ninguno de nombre Adán Augusto.
Además, ostenta un Diplomado en Derecho Notarial por la UNAM.
El ahora ex secretario de Gobernación no ha publicado libros, pero en noviembre tuiteó una fotografía en la que aparece con una pluma en la boca, inclinado sobre una gran carpeta en la que resalta la palabra “borrador”.
Ebrard: Equilibrio de poderes
En su tesis “Congreso y democracia en México”, con la que se graduó en 1984 de la Licenciatura en Relaciones Internacionales del Colegio de México, Marcelo Ebrard sostiene que el Congreso de la Unión quedó marginado como espacio de debate y resolución de conflictos porque el escenario principal de actividad política era el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Para corregir esta situación, plantea cambios necesarios para darle mayor peso al Poder Legislativo, e incluso concederle alguna influencia a la oposición, específicamente al Partido Acción Nacional (PAN).
“La evolución de esta tendencia en el corto plazo fortalecería considerablemente la posición del Congreso como la instancia más importante de debate político, dinamizando los procesos de integración de los grupos de presión al Congreso y ampliando la capacidad de los partidos de oposición, en particular de Acción Nacional, para ocupar un espacio ideológico mayor, crear liderazgos con cobertura social y propiciar la negociación en la Cámara de medidas del Ejecutivo, misma que consolidaría la representatividad de los partidos de oposición”, apuntó Ebrard.
Como marco, discute los dos proyectos de los constituyentes de 1917, el liberal contrapuesto al más confrontativo de los generales Mújica y Jara y de Juan de Dios Bojórquez, que planteaban que el Legislativo fuera una asamblea de revolucionarios que se constituyera en el principal interlocutor del Ejecutivo.
En su currículum, Ebrard menciona haber cursado una especialidad en administración pública en la Ècole nationale d’administration, en París. No fue posible hallar referencias de su paso por esta institución en su antigua web, www.ena.fr, ni en la nueva (cambió su nombre a Institut national du service public) insp.gouv.fr.
En marzo pasado, publicó su único libro, su autobiografía “El camino de México”, en el que ofrece una versión de su paso por el equipo de Manuel Camacho; su oposición al Fobaproa y su polémico papel en la Línea 12 del Metro de la Ciudad de México; y expone su propuesta de gobierno: que “el país alcance su máximo potencial”, la reducción de las desigualdades y el fortalecimiento de la clase media.
Fernández Noroña: Movimiento Obrero
En la presentación de su página web personal, el aspirante del PT Gerardo Fernández Noroña (quien se autodescribe así: “Soy un luchador social, político, librero y libérrimo”) destaca que se tituló en 1983 con la tesis “Estudio comparativo entre un conflicto en su contexto en la dicotomía movimiento obrero-Acermex”. Afirma que “la realicé con María Eugenia Balderas Belloc y consta de 293 páginas, ni una de ellas es plagiada”.
Con la cédula profesional 1612636, estudió la Licenciatura en Sociología en la Unidad Azcapotzalco de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
La investigación no está disponible en el repositorio institucional Zaloamati de esa institución.
Aunque no lo menciona en su página web, Fernández Noroña publicó un libro, “La Casa Blanca: Historia de un compromiso incumplido o la venta del país”, en el que relata “mi relación con el monumento a la corrupción que la Casa Blanca de Sierra Gorda número 150 representa, y la historia de un compromiso incumplido por el desgobierno de Peña, a saber, deshacerse de esa casa”.
Velasco: sin tesis conocida
En su perfil de LinkedIn, Manuel Velasco Coello afirma ser licenciado en Derecho por la Universidad Anáhuac. Diversas notas refieren que efectivamente ahí estudió, aunque no se tituló en esa institución.
En las páginas de su partido, del Congreso y de la Conferencia Nacional de Gobernadores, el aspirante del PVEM indica ser egresado de otro lugar, llamado “Humanitas. Escuela Superior de Leyes y Negocios” (cédula 7035181), la cual, según su reglamento, admite titular a sus alumnos si necesidad de presentar una tesis.
Aunque en ningún sitio menciona tener una tesis o algún escrito de relevancia, esto parece ser un tema de su interés por que en febrero de 2020 propuso la gratuidad de los trámites de titulación porque “los trabajos de investigación de los postulantes a un título universitario, ya sea mediante una tesis u otras modalidades de trabajos terminales, representan grandes aportes académicos”.
cog