El Partido de la Revolución Democrática (PRD) enfrenta la pérdida de su registro como partido político nacional, pues no obtuvo el 3 por ciento en las elecciones federales del 2 de junio.
Apenas el pasado 5 de mayo, el PRD cumplió 35 años, en los cuales postuló a sólo dos personas a la presidencia: dos veces a Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano, su fundador, y dos a Andrés Manuel López Obrador. Aunque ambos fueron candidatos tres veces, con diferentes partidos.
¿Cómo surgió el PRD?
Bajo el lema "¡Democracia ya, Patria para todos!", el PRD surgió tras las elecciones de 1988, sobre las cuales siempre se ha cuestionado el triunfo de Carlos Salinas de Gortari, quien compitió contra Cuauhtémoc Cárdenas, postulado por el Frente Nacional Democrático (FND).
Un año antes, en 1987, un grupo de priistas llamado Corriente Democrática, integrado por Cuauhtémoc Cárdenas, Ifigenia Martínez y Porfirio Muñoz Ledo, entre otros, pretendía democratizar las elecciones internas del PRI para evitar que el presidente del país en turno eligiera a su sucesor y revertir el grito tecnocrático y neoliberal del partido, lo que se veía como un abandono de sus orígenes revolucionarios.
Sin embargo, la Corriente Democrática fue aplastada, Carlos Salinas de Gortari fue impuesto como candidato, Martínez y Muñoz Ledo, junto con otros priistas y fuerzas de izquierda, decidieron postular a Cuauhtémoc Cárdenas a la presidencia de la República.
De acuerdo con Toño Cárdenas, politólogo de la UNAM con maestría en la London School of Economics y militante del PRD, el surgimiento del Sol Azteca no debe reducirse a la escisión del PRI que lideró Cuauhtémoc Cárdenas, sino que debe verse como un ejercicio de unificación de las izquierdas.
“El PRD era una federación de partidos y hay que entender que para 1989 la izquierda en México estaba muy dividida y había habido un intento de unificación con el Partido Socialista Unificado de México, el cual fracasó. Hubo un segundo intento con el Partido Mexicano Socialista (PMS) de Heberto Castillo, el cual fue un poco más exitoso pero fue hasta el 89 con el llamado que hace Cárdenas para fundar el PRD que se da la unificación de las izquierdas”.
El 14 de octubre de 1987, Cárdenas recibió la postulación a la presidencia por el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM), a la cual se adhirió el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional, el Partido Social Demócrata y el Partido Popular Socialista.
Es importante anotar que estos partidos postularon a Cárdenas y son importantes en la serie de hechos que llevarían al surgimiento del PRD pero no fueron parte formal de su fundación.
Ese año, Heberto Castillo era candidato del PMS, pero este declinó por Cárdenas cuando las boletas ya estaban impresas.
Las izquierdas de México analizaron tomar las armas en 1988
Tras perder la elección, los grupos de izquierda analizaron seriamente evitar que Salinas de Gortari tomara el poder iniciando una revuelta armada.
“En los grupos de izquierda había muchos exguerrilleros y aún era muy vigente el ideario de la Revolución, pero Cárdenas y Heberto Castillo dieron el paso a un lado señalando que no valía la pena iniciar una revolución armada para que él tomara el poder y decidieron construir un proyecto político a futuro, ahí surgió el PRD”, contó Toño Cárdenas en entrevista para TELEDIARIO.
Alrededor de ese ideal y de Cárdenas se lograría aglutinar al Partido Mexicano Socialista, a la Coalición de Izquierda y al Movimiento de Acción Popular.
También se unieron organizaciones sociales como la Coalición Obrera, Campesina, Estudiantil del Istmo (COCEI, que había ganado los comicios locales en Juchitán de Zaragoza), la Central Independiente de Obreros Agrícolas y Campesinos (CIOAC), la Asamblea de Barrios de la Ciudad de México (creada tras los sismos de 1985), la Unión de Colonias Populares, la Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata, la Central Campesina Cardenista (fundada por sectores agrarios y campesinos inconformes con el corporativismo del PRI, para apoyar la candidatura del frente), el Sindicato de la UNAM, entre muchas otras.
El PRD nunca consiguió las 300 asambleas constitutivas
Toño Cárdenas señala que el PRD buscó formalizar su registro como lo indican las reglas electorales, pero nunca lograron reunir las 300 asambleas que exige la ley.
¿Cómo se creó el PRD entonces? Heberto Castillo cedió el registro del PMS, el cual cambió sus siglas, logo y colores para que entraran todos los grupos de izquierda convocados por Cárdenas.
Posterior a esto existe el registro de que el Salinato persiguió la apertura democrática asesinando a alrededor de 696 perredistas.
Para Toño Cárdenas, esta persecución del régimen autoritario existía desde los 60 y 70, sin embargo a partir de la creación del PRD y ante la inminente apertura democrática que llevaría al cambio de régimen, fue más fácil reprimir a un grupo que tenía un logo y un emblema visibles, así como un liderazgo claramente identificable, por lo que él considera que la democratización de México costó más vidas.
- Política
El auge del PRD
La consolidación política del PRD, cuando se convirtió en uno de los grandes jugadores de la política mexicana y uno de los que había que tomar en cuenta para tomar ciertas decisiones se dio a partir de 1993.
Toño Cárdenas señala que en esa época comenzaron a tener más peso pues comenzaban a ganar elecciones, la más importante fue el triunfo en 1997 de Cuauhtémoc Cárdenas como jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal, entidad que sólo ha sido gobernada por el PRD y Morena, una escisión del PRD cuyos principales liderazgos surgieron en su totalidad del Sol Azteca.
Si bien esos triunfos fueron parte de la democratización mexicana, también es cierto que a partir de que Andrés Manuel López Obrador —uno de los fundadores del PRD—, presidió ese partido en 1996, el partido experimentó un meteórico crecimiento electoral, basado en la estrategia de reclutar a quien fuera a cambio de que pudiera ganar una elección y eso implicó que muchos expriistas entraran al PRD.
“O sea la práctica que ahorita ven en Morena de dejar entrar a los expriistas, expanistas, experredistas, a quien sea con tal de que pueda ganar su elección: eso lo inició Andrés Manuel en el PRD cuando era presidente nacional y eso pues molestó a mucha gente que era la más pura e ideologizada del PRD; estuvieron molestos por haber militado tantos años y de repente ver que las candidaturas se las llevaba un priísta que se había peleado con su dirección estatal y ahora era candidato a gobernador y ganaba”, narra Toño Cárdenas.
Si bien esas prácticas dieron un impulso muy grande al PRD y lo hizo crecer electoralmente de manera muy rápida, a cambio se comprometieron algunos de los ideales originales del partido.
El declive del PRD
Muchos analistas consideran que el declive del PRD se dio al adherir en 2012 el Pacto por México. Según estos, para el electorado resultó poco atractivo y hasta una traición ver a la izquierda junto al partido por el que, según encuestas, nunca votarían, y a lado del PAN, que representa todo lo contrario al PRD.
Pero para Toño Cárdenas, el Pacto con México fue una de las épocas de mayor empoderamiento del PRD pues le permitió afectar la política nacional del país:
“Nunca hemos sido gobierno federal, pero la manera en que el PRD pudo impulsar políticas a través del Pacto con México como la reforma fiscal, la de telecomunicaciones, la económica, la educativa, la laboral… Eso tenía a la gente del partido muy emocionada porque podían hacer propuestas dentro del pacto federal”.
Para él, el declive del PRD inició en la dinámica interna “porque se empezaron a tomar malos acuerdos y hubo un canibalismo interno muy fuerte. Creo que sí hubo un error de parte del grupo de Nueva Izquierda, de Los Chuchos, se vieron bastante voraces, era prácticamente su voluntad y ellos repartían las candidaturas, ellos decidían quién iba, quién no, ellos veían el financiamiento de los estados y pues claramente mucha gente se molestó con esto.
No estaban contentos con cómo se dirigía el partido y del otro lado estaba Andrés Manuel con un reto enorme, la fundación de Morena, y diciendo bienvenidos y bienvenidas los que quieran venir. La corrupción es un cáncer que te puede matar a la institución más noble y eso es lo que pasó con el PRD”.
El legado del PRD
Para Toño Cárdenas el legado del PRD, en principio, es que la democratización de México no puede ser entendida sin el PRD.
En términos de instituciones, apunta que el INAI, el INE, la Comisión de los Derechos Humanos, incluso el Tribunal Electoral, fueron demandas de grupos perredistas.
Pero insiste en destacar el papel del PRD en el Pacto por México:
“A mí me encanta decir que uno de los legados más fuertes que tiene el PRD es la reforma fiscal que nos sigue rigiendo hasta el día de hoy, porque es muy poco rentable políticamente decir que vas a aumentar impuestos pero es necesario y al único partido que he visto hacerlo ha sido el PRD.
Y lo hizo fiel a sus principios de izquierda de mayor fortaleza al Estado, cobrarle más a los que más tienen y que paguen más los que más tienen: esa fue la reforma fiscal de 2014 donde pusimos un chorro de nuevos impuestos, el impuesto a la comida chatarra, a las gasolinas, a los cigarros…
Todas esas fueron causas del PRD y gracias a ellas nuestras finanzas no dependen del precio del petróleo sino que dependen de la recaudación que obtenemos a través de impuestos como esos. Ese es un legado enorme”.
Cárdenas destaca que el PRD dio la prueba de que la izquierda sí puede estar unida pero que estar unida no significa ser iguales, ni que se acabe el conflicto, sino que había que encontrar una manera de administrar el conflicto.
También destaca la manera de hacer política del PRD a través de asambleas populares muy cercanas a la gente, la cual, dice, difícilmente se hubiera dado desde un partido como el PRI o el PAN y apunta que si bien el PRI lo intentó, lo hizo desde el poder y no como un ejercicio horizontal de construir con la gente:
“Antes de que existiera el PRD no existía un partido que se acercara a las comunidades más recónditas a tratar de iniciar comités de base de vecinos”.
En términos de derechos, Cárdenas destaca el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo, el derecho de amar a quien deseas ama, la normalización de las banderas progresistas para toda una generación y narra que amigos suyos de otros países le aseguran que es muy difícil para las izquierdas enarbolar pañuelos verdes o banderas de arcoíris dentro de recintos de gobierno, lo cual en México sí es posible e incluso está mal cuestionarlo.
Ante la inminente pérdida del registro, Toño Cárdenas concluye que la izquierda democrática no empezó con el PRD y no se acaba con él: “El sueño de un México democrático es más grande que las personas que vieron al PRD como una franquicia”.
KAT