En un plazo de 30 a 45 días y luego de 22 años, finalmente iniciará la transición para que Fuerza Civil ceda la seguridad a la Policía de Monterrey, comenzando con la zona Poniente.
El secretario de Seguridad de Nuevo León, Gerardo Palacios Pámanes, explicó que la corporación estatal seguirá previniendo y enfrentando los delitos de alto impacto en esa zona, pero los delitos menores quedarán bajo responsabilidad del municipio.
"Entre 30 y 45 días vamos a empezar un trabajo de entrega recepción paulatina, dosificada, acompañada por todo el tiempo que decida la policía municipal, ¿cuánto personal va a empeñar la policía municipal? todo el que resulte necesario para cubrir todos los cuadrantes que conforman ese sector".
Tal y como había anticipado el pasado domingo en el programa Cambios, Palacios Pámanes, explicó que los efectivos municipales estarán atendiendo los delitos de faltas administrativas o de bajo nivel de violencia que serán asignados por el C5.
"Todos los casos de faltas administrativas y de delitos que tienen un bajo nivel de violencia pero que son recurrentes y cotidianos van a ser asignados por el C5 a una patrulla municipal en ese sector y Fuerza Civil va a estar presente en el sector para cuando el C5 le asigne un auxilio de delitos de alto impacto".
El funcionario estatal, dijo que serán cientos de uniformados los que participarán en este proceso paulatino.
"Vamos a poder empezar con este proyecto tan importante para la seguridad pública de todos los que vivimos en Nuevo León porque nos conviene que más policías de fuerza civil puedan estar dedicados a la prevención y combate de los delitos de alto impacto".
Lo anterior, obedece a los acuerdos entre el gobernador Samuel García y el alcalde de la capital, Luis Donaldo Colosio.
Por último, el secretario dijo que actualmente existen unidades estatales con cuatro elementos, otras más con binomios, en motocicleta y con patrullaje con infantería en zonas comerciales, que bien podrán ser aprovechados para compartir delitos de alto impacto.
cog