Luego de una semana en la que tuvieron un desencuentro por el caso de la joven Yolanda Martínez, la Fiscalía de Justicia y el Gobierno de Nuevo León emitieron un pronunciamiento conjunto en el que aseguraron que el estado es seguro y sus índices delictivos se encuentran por debajo de la media nacional.
En el escrito, firmado de manera institucional, se refiere que el aumento de hechos violentos plasmado en días previos obedecen al incremento en las denuncias ante la autoridad ministerial, no necesariamente a un alza en los crímenes.
"Nuevo León es el único estado de la Federación donde se puede denunciar ante las policías municipales y estatales, y estas reportar las denuncias de forma electrónica (...) Es importante señalar que el alza de denuncias no es índice de inseguridad, sino de confianza institucional", se cita en el documento.
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De acuerdo al comunicado conjunto, el sistema nacional de seguridad pública arroja que Nuevo León es el lugar 17 de 32 estados para el delito de homicidio, el 21 en el tema de los secuestros, el 26 en el rubro de robos en general y el lugar 22 en el apartado de lesiones.
Sobre la trata de personas, se aclaró que la incidencia que se tiene es producto de que la entidad es de las pocas que investiga dicho delito, y presumieron que se tiene el primer lugar nacional en rescate de víctimas.
Y aunque el asunto que provocó el desencuentro entre el gobernador Samuel García y el Fiscal Gustavo Adolfo Guerrero fue el de los feminicidios, el comunicado aborda brevemente esta problemática.
"Es esencial insistir que, en materia de feminicidios, por ley y por política pública, toda muerte de mujeres se investiga con el protocolo de feminicidio".
cog