La Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) dictaminó que la mayoría de los pozos y tomas domiciliarias cercanas al río Atoyac en cinco municipios de Puebla y Tlaxcala sí tienen contaminantes, pero por debajo de los niveles de alerta para el consumo humano.
Lo anterior se derivó de la reciente publicación de resultados sobre la evaluación que Cofepris realizó, en agosto de 2022, a 31 pozos que se abastecen con el agua del Alto Atoyac, en respuesta a la recomendación 10/2017 de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para atender la contaminación en el afluente y los daños a la salud que causa.
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De los pozos revisados, ocho se localizan en los municipios de San Martín Texmelucan y Huejotzingo, en Puebla, mientras que los 23 restantes se ubican en Tepetitla de Lardizábal, Nativitas e Ixtacuixtla de Mariano Matamoros, en Tlaxcala.
"Los resultados de estos análisis en los pozos y en tomas domiciliarias no reflejaron concentración de arsénico, fluoruros, benceno, etilbenceno, tolueno, xileno ni trihalometanos que excedieran los límites máximos establecidos en la Norma Oficial Mexicana 127 (NOM-127)", sentenció Cofepris.
La recolección de muestras la realizó la Comisión de Evidencia y Manejo de Riesgos (Cemar) junto a la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios del estado de Tlaxcala (Coeprist), la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios del estado de Puebla (Dipris), y el apoyo de los Laboratorios Estatales de Salud Pública (LESP) de Michoacán, Puebla y Tlaxcala.
Encuentran plomo en pozo en Tlaxcala
Aunque aseguró que la mayoría de puntos pasó las evaluaciones correspondientes, la Cofepris advirtió que un pozo ubicado en el municipio de Nativitas, Tlaxcala, presentó altas concentraciones de plomo y éstas podrían afectar la salud de los habitantes.
Y es que mientras la NOM-127 permite hasta 0.01 miligramos de plomo por litro (mg/L), para este caso el material se elevó hasta los 0.063 mg/L, por lo que recomendó al sistema operador de Nativitas "revisar el sistema de distribución del agua para identificar el origen" de la presencia del químico en la toma domiciliaria.
"La exposición al plomo se asocia a posibles efectos tóxicos agudos y crónicos, lo que afecta los sistemas cardiovascular, hematológico, musculoesquelético, renal, reproductivo, neurológico e inmunológico; además, aumenta el riesgo de cáncer de pulmón y estómago", alertó Cofepris.
Cofepris pide clorificar el agua
La Cofepris también hizo una evaluación para medir cómo se desinfecta el agua potable que se reparte en los cinco municipios por los que pasa la cuenca del Alto Atoyac, y llegó a la conclusión de que tanto en Puebla como en Tlaxcala hace falta más cloro residual para dichas labores.
Y es que el 50 por ciento de las tomas domiciliarias en los municipios de Puebla, y el 55 por ciento de las tomas en los municipios de Tlaxcala, presentaron concentración de cloro residual libre menor a 0.2-1.5 mg/L, lo cual corresponde al rango establecido en la NOM-127 pero es insuficiente.
"Esta determinación evidenció la ausencia de cloro residual, ya sea por cloración deficiente o ausencia de ésta, lo cual representa un riesgo para la salud de las poblaciones por la exposición a contaminantes bacterianos presentes en el agua", apuntó.
Por lo tanto, la Cofepris recomendó a los municipios de San Martín Texmelucan, Huejotzingo, Tepetitla de Lardizábal, Nativitas e Ixtacuixtla de Mariano Matamoros que garanticen "la correcta desinfección del agua que abastece a sus habitantes para prevenir riesgos en la salud pública".
AGA