Dominic Thiem conquistó el Abierto de Río de Janeiro, su octavo título en individuales dentro de la Gira de la ATP, tras imponerse el domingo 7-5, 6-4 a Pablo Carreño Busta.
El austríaco Thiem se coronó en arcilla, su superficie favorita, y ahora espera enderezar la marcha en una temporada que no comenzó con muy buenos resultados.
Fue el sexto título conseguido sobre polvo de ladrillo por Thiem, quien se dirige ahora a Acapulco para participar en el Abierto Mexicano, sobre canchas duras, que conquistó el año anterior. En ese torneo participarán seis de los 10 mejores tenistas del ranking de la ATP
"Desde luego que no será fácil", dijo Thiem, respecto a la necesidad de hacer un largo vuelo el domingo hacia el puerto mexicano en el Pacífico. "Hice lo mismo el año pasado y salió bien. No es la mejor preparación, pero espero conseguirlo otra vez. La confianza es mucha ahora. Me siento muy bien por la forma en la que estoy jugando".
Thiem ocupa el octavo lugar del escalafón y fue segundo preclasificado en Río. Sin embargo, se convirtió en el favorito cuando el primer cabeza de serie, Kei Nishikori, fue eliminado en la primera ronda.
El austríaco no perdió un solo set en el torneo.
Carreño Busta no ha podido doblegar a Thiem en cuatro intentos. Por lo menos, el español conquistó el título de dobles, junto con el uruguayo Pablo Cuevas. Derrotaron a los colombianos Juan Sebastián Cabal y Robert Farah, por 6-4, 5-7.