BAGDAD (AP) — Fuerzas especiales iraquíes combatieron el lunes contra milicianos del grupo Estado Islámico en dos vecindarios del este de Mosul, dijo un alto comandante del ejército, adentrándose en la ciudad tras sacar a los extremistas del complejo de la universidad local.
De acuerdo con el jefe de las fuerzas antiterroristas de Irak, general Abdel Ghani al-Asadi, los soldados avanzaron hacia los vecindarios de Shurta y Andalus. Estos son algunos de los últimos sectores que quedan entre el territorio tomado por el gobierno en el oriente de Mosul y el río Tigris, que divide la ciudad.
En Andalus, varios bulldozers despejaron caminos bloqueados abriéndole paso a un largo convoy de Humvees negros. Residentes dijeron que combatientes del grupo Estado Islámico habían huido solo una hora antes del inicio del asalto. Al-Aridi dijo que el retiro mostraba que la reciente serie de victorias territoriales habían quebrantado la voluntad de los milicianos.
El Estado Islámico envió seis coches bombas manejados por suicidas para atacar las fuerzas iraquíes que avanzaban, pero —contrario a lo ocurrido durante las primeras semanas de la operación en Mosul— la mayoría de los autos usados el lunes no estaban fuertemente acorazados y fueron inhabilitados con disparos de tanques.
Un atacante suicida logró manejar su automóvil lleno de bombas a través de un camino bloqueado y chocó contra un convoy iraquí. El estallido rompió ventanas de viviendas a cuadras a la redonda, llenando de esquirlas al tranquilo vecindario residencial.
Al menos un Humvee quedó destrozado por el ataque y cuatro soldados resultaron levemente heridos, de acuerdo con un oficial iraquí que supervisaba el operativo y habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado para hablar con la prensa.
La televisión estatal iraquí mostró imágenes en vivo de enfrentamientos cerca del Hotel Internacional Ninevah, una de las instalaciones más emblemáticas de la ciudad.