Cardenales de Arizona anunció hoy que el receptor Michael Floyd fue despedido del equipo después de que este fue arrestado por conducir bajo la inluencia del alcohol.
"Hubo muchos factores, pero fue una difícil decisión", declaró el dueño Michael Bidwill al sitio web oficial de la Liga Nacional de Futbol Americano (NFL).
Asimismo, aseguró que hubo un común acuerdo entre el entrenador Bruce Arains y el gerente general Steve Keim para dejar libre al jugador egresado de la Universidad de Notre Dame.
No es la primera vez que Floyd infringe la ley de esta forma, pues en 2011 también fue detenido por manejar en estado de ebriedad, por lo que ahora el receptor buscará equipo en el próximo periodo de agencia libre en la NFL.