TEL AVIV, Israel (AP) — Un funcionario israelí dijo que el caos en el Medio Oriente ha debilitado a los enemigos del estado judío por lo cual son escasas las probabilidades de que Israel se vea involucrado en una guerra en el 2017.
El ejército ha llegado a la conclusión que ni el movimiento guerrillero Jezbolá en el Líbano ni el movimiento Hamas que gobierna la Franja de Gaza desean incitar a un conflicto bélico en el 2017, dio la fuente que pidió no ser identificada.
Dijo que Jezbolá está envuelta en el conflicto en Siria y que Hamas ha perdido gran parte de su apoyo externo. Aun así, el funcionario advirtió que siempre existe la posibilidad de "una dinámica de escalada" que pueda provocar un enfrentamiento.
Israel libró una guerra contra el Jezbolá por un mes en el 2006 y desde entonces ha librado tres guerras contra el Hamas.