Tras un par de meses, los aparadores de las tiendas deslumbran con una nueva colección de ropa. Crees que debes comprarla, cuando quizá deberías sentir vergüenza. Como ocurre en Suecia con el köpskam, la tendencia que concientiza sobre las consecuencias de la industria textil en el medio ambiente.
¿En qué consiste el köpskam? Antes de aumentar las ganancias de los gigantes del fast fashion o moda desechable, los defensores del köpskam invitan a adquirir prendas de segunda mano, para darles una segunda vida.
Esta tendencia, impulsada por la activista sueca Greta Thunberg de 16 años, ha provocado que la mayoría de sus ciudadanos duden al comprar una nueva prenda de vestir, señala Anna Breman, economista de Swedbank.
Pocos presumen sus compras en redes sociales, e incluso regalar productos de segunda mano ya no es visto como una desatención o algo inferior.
¿Cómo afecta la industria textil al ambiente? La industria de la moda representa el 20% del desperdicio total de agua a nivel mundial, de acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El impacto ambiental de la moda La producción de ropa y calzado genera el 8% de los gases de efecto invernadero, según la ONU. El sector del vestido utiliza 93 mil millones de metros úbicos de agua cada año. Con esta cantidad, sobrevivirían cinco millones de personas.
Sobre la ropa no vendida, el periodista sueco Fredik Virtanen ha alertado sobre las excesivas cantidades que ha incinerado el gigante sueco de la moda H&M.
“En 2016, quemó 19 toneladas de ropa de remanentes en una central térmica de la ciudad de Västerås. Ese mismo año, H&M Dinamarca incineró 9,6 toneladas de prendas de vestir, el equivalente a 25.000 pares de vaqueros. ¿Cuántas toneladas se quemaron en Alemania? Y en Estados Unidos”, cuestionó Virtanen.
El pacto de moda por el planeta En la pasada cumbre de agosto del G7, la reunión de países con mayor poder político y económico del mundo, se juntaron los representantes de las 32 firmas mundiales más importantes.
El objetivo: tomar medidas ante el desastre ecológico que provoca la industria de la moda. Marcas como Adidas, Burberry, Chanel, H&M, Inditex, Nike, Prada, Puma, Ralph Lauren, entre otras, abordaron estrategias para “limitar el calentamiento global, restaurar la biodiversidad y proteger los océanos”, reportó la agencia EFE.
Inditex anunció que para 2020 eliminará el uso de bolsas de plástico. Y antes de 2025, prometen que el 100% de algodón, lino y poliéster que usen será orgánico, sostenible o reciclado.
De aquí a 2030, el pacto contempla que todas las firmas utilicen energías renovables, además de no arrojar productos químicos a ríos y océanos, y reducir las micro-fibras de materiales sintéticos, aunque su compromiso se reduce a seguirlo de forma voluntaria.