Uno de los sitios más emblemáticos de Guanajuato es el "Callejón del beso", donde se supone que los enamorados se dan un tierno beso en el tercer escalón y esto les promete amor por los siguientes siete años.
Pero, ¿de dónde salió la leyenda?
Cuenta la leyenda la historia de Carmen, una mujer cuyo padre era severo y estricto, pues buscaba ceder la mano de su hija a un hombre importante y empresario.
Por lo que la mantenía cautiva para evitar conociera a cualquier hombre "ordinario" en el pueblo minero. Sin embargo, conoció a Luis.
Un humilde minero que la cortejaba en un templo cercano a su hogar, a escondidas de su padre.
En uno de sus encuentros fueron descubiertos por el padre, quien enfurecido la encerrada junto a su dama de compañía Doña Brigida.
Ante esto, Luis compró la casa frente a la de su amada para así por su ventana y un balcón tener contacto, pero de nueva cuenta el padre los descubrió.
Mientras se juraban amor eterno y sellaban su promesa con un cálido beso, se escucharon al fondo las voces de Doña Brígida y su padre discutiendo al prohibir la entrada a la habitación.
Y al entrar atravesó el pecho de su hija con una daga.
Don Luis enmudeció de espanto, al ver caer a su amada con sus manos aún entrelazadas, dio un último beso a su mano cada vez más fría, pálida y sin vida, suicidándose al poco tiempo, arrojándose desde el brocal del tiro principal de La Mina de la Valenciana.
Dejando de aquella historia de amor, sólo sus viejos balcones viéndose entre sí, en su afamado Callejón del Beso, que mide, sólo 68 cm de ancho.
Sin duda, aunque podría significar una historia triste, turistas de todo el mundo han aprovechado el romántico escenario para disfrutar un beso con su pareja.