Tricia Jones, de 45 años de edad, negó vacunarse contra el Covid-19 debido a los miedos que tenía a los efectos secundarios. Murió después de contagiarse de la peligrosa variante Delta del Coronavirus.
Oriunda de Missouri, Estados Unidos, Jones se mostraba insegura después de ver en las noticias la cantidad de casos en relación a los extraños efectos que provocan algunas vacunas, como coágulos en la sangre y problemas cardíacos.
Más allá de las recomendaciones, la mujer, madre de dos hijos, prefirió refugiarse detrás de su temor y no recibir la dosis de la vacuna, así lo informaron medios locales.
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Desafortunadamente, el hijo de Tricia contrajo Covid-19 en la escuela, y como suele suceder, lo "llevó" a su casa, fue en ese momento cuando la madre enfermó.
Pese a que de entrada, el cuadro de Tricia era optimista, su salud comenzó a deteriorase al punto de nunca más poder recuperarse.
Luego de conocerse su caso, la familia comenzó a instar a la gente a vacunarse contra el virus y evitar sufrir de la misma manera que lo hizo la mujer de Kansas City.
Deborah Carmichael, la madre de la víctima, se mostró desconsolada. Contó que ella sí había recibido su primera dosis, pero su hija estaba escéptica.
Y recalca que tampoco ayudó que cuando ella misma había ido a vacunarse, no la pasó bien los días siguientes. Eso generó más dudas, susto, y terminó por inclinar la balanza. "Nunca hubiera pensado que perdería a mi hija a los 45 años", se lamenta.