Querétaro, 4 Ene (Notimex).- Las muñecas confeccionadas por mujeres otomíes de Querétaro siguen siendo un juguete muy apreciado en las comunidades indígenas, pero también se han consolidado como una artesanía estatal de gran impacto nacional e internacional.
Las muñecas otomíes no sólo son un juguete para las niñas indígenas, sino una artesanía que refleja tradición, idiosincrasia, Cultura y raíces, lo cual le ha valido contar con un museo en la capital queretana y un festival anual en su municipio de origen, Amealco.
Doña Severa, septuagenaria artesana de San Ildefonso, municipio de Amealco, refirió que las muñecas todavía son muy apreciadas por las niñas indígenas para jugar en sus ratos libres.
Mencionó que las niñas de San Ildefonso y de otras comunidades indígenas de la jurisdiccional de Amealco todavía tienen muy arraigada la costumbre de jugar con esas muñecas, que son confeccionadas con tela de popelina y coloridos listones.
"Las niñas juegan a la comidita, a la doctora, a los esposos, siempre junto con su muñeca otomí, esa no la sueltan, es parte de ellas", explicó la artesana, quien ofrece sus productos en el Centro de Desarrollo Artesanal Indígena (Cedai).
Doña Severa agregó que aunque hay otros juguetes que llegan a aquellas comunidades, las niñas amealcenses prefieren las muñecas artesanales dado que a su decir, guardan parte de la cultura indígena.
La artesana otomí mencionó que las muñecas más pequeñas que se venden en el Cedai tienen un costo aproximado de 40 pesos, mientras que las más grandes alcanzan los 100 pesos.