ISLAMABAD (AP) — Las autoridades paquistaníes cerraron un cruce fronterizo vital con Afganistán por donde ingresan provisiones al país mediterráneo, lo que incrementó las tensiones entre los dos países tras el sangriento ataque suicida a un concurrido santuario sufí en Pakistán, informaron fuentes oficiales el sábado.
El cierre de la frontera en Chaman, en la provincia suroccidental de Baluchistán, respondió al ataque a un santuario sufí en el sur de Pakistán el jueves que dejó 88 muertos. Se lo considera un intento de presionar a Kabul para que tome medidas contra los milicianos que, según Pakistán, tienen guaridas en Afganistán.
El grupo Estado Islámico se declaró responsable del ataque al santuario Lal Shahbaz Qalander en Sehwan. Las fuerzas de seguridad paquistaníes iniciaron operaciones nacionales en las cuales, dicen, han muerto un centenar de "terroristas".
Pakistán cerró la frontera en Torkham horas después del bombardeo y en Chaman el viernes por la noche, dijo un alto oficial militar.
Otro funcionario confirmó los detalles y añadió que los camiones y contenedores que llevaban provisiones quedaron estacionados a varios kilómetros de los cruces. Torkham conecta Pakistán con la provincia afgana de Nangahar, y Chaman se encuentra cerca de Spin Boldak en Kandahar. Las fuentes paquistaníes hablaron bajo la condición de anonimato por no estar autorizadas a informar a la prensa.
En tanto, la prensa informó que fuerzas paquistaníes con respaldo de artillería atacaron campos de Jamaat-ul-Ahrar, una fracción que se separó del Talibán paquistaní, cerca de la frontera afgana, con un saldo indeterminado de bajas para los milicianos.
El ejército paquistaní dijo el viernes que convocó a diplomáticos afganos y les entregó una lista de 76 sospechosos de "terrorismo" guarecidos en Afganistán. Islamabad quiere que las autoridades afganas tomen medidas inmediatas, incluida la extradición de los sospechosos.