Hijo del oficinista de pagaduría John Dickens y la ama de casa Elizabeth Barrow, Charles John Huffam Dickens vio la primera luz del día en Portsmonth, Inglaterra, en 1812; fue el segundo hijo de ocho concebidos por este matrimonio, y se sabe que desde su infancia conoció lo que era la pobreza y la humildad.
En 1833 decidió enviar distintos escritos a periódicos locales, convencido de que sería publicado algún día y en diciembre del mismo año, el “The morning Chronicle” publicó la primera de una serie de descripciones de la vida cotidiana londinense que el escritor había firmado bajo el pseudónimo de “Boz”.
El 9 de junio de 1865 sufrió el famoso choque ferroviario de Staplehurst en el cual los siete primeros vagones del tren cayeron de un puente en reparación, curiosamente, el único vagón de primera clase que no cayó fue en el que se encontraba Dickens.
Cuentan que nunca se recuperó por completo y en frágiles condiciones siguió con su tour por Estados Unidos hasta que el 9 de junio de 1870, una apoplejía le arrebató la vida a los 58 años, sus restos fueron enterrados en el Poet’s Corner de Westminster Abbey.