Uno de los casos de mala conducta por parte de la policía quedo descubierta durante una investigación de cinco controvertidos registros en Sydney el año pasado.
La mayoría tuvo lugar durante festivales de música, los policías habrían dejado a los buscados sintiéndose humillado y degradados, según informa un reciente informe.
La policía de Nueva Gales del Sur pronunció sobre los nuevos descubrimientos que serán considerados los hallazgos del informe.
La Comisión de Conducta de la Aplicación de la Ley, a través del informe, solicitó a la fuerza polivial que se disculpe con una de las mujeres involucradas, además de señalar otro caso en el que un oficial había sido suspendido del servicio.
Los casis se revisaron después de que los padres de la joven se quejaron, recibiendo cobertura de medios locales.
En enero del 2019, la policía registró a dos jóvenes a las afueras de un casino de Sydney; uno de los elementos se pidió a una que se quitara el tampón.
Una revisión de este incidente “reveló una falta de claridad para los oficiales con respecto a la legalidad de tal solicitud”, puntualiza el informe.
Este descubrimiento destapó la revisión de dos casos más en los que se presentaron quejas y no se encontraron drogas.
En otro caso, a una joven intérprete en el festival Secret Garden se le ordenó que se bajara la ropa interior y se inclinara antes de que los oficiales varones le hablaran sin profesionalidad y se rieran de ella, según el informe.
La revisión de los casos ha demostrado que la policía no sabe lo que podían hacer o no durante una búsqueda de striptease por lo cual se presentó un nuevo manual en agosto pasado para sustituir a los oficiales correctamente.
Según la ley australiana, la policía solo puede llevar a cabo inspecciones de strip si "la gravedad y la urgencia de las circunstancias" significa que es razonable y necesario hacerlo.
También deben realizar la búsqueda menos invasiva posible. Es ilegal buscar áreas genitales o cavidades corporales.
En el caso de menores, un padre o tutor debe estar presente, a menos que sea necesaria una búsqueda inmediata para proteger a la persona o evitar la destrucción de evidencia.