Bruselas, 9 Mar (Notimex).- La Unión Europea (UE) está preocupada con la "creciente tensión y desestabilización" en la región de los Balcanes Occidentales, escenario de sangrientas guerras nacionalistas en los años 90, luego de la disolución de la antigua Yugoslavia.
"Tensiones y divisiones han salido del control, en parte por causa de influencias externas poco sanas", afirmó el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en alusión a la creciente interferencia de Rusia, Turquía y países del Golfo Pérsico en la región, cuya estabilidad es importante para la vecina UE.
No obstante, los tres actores internacionales no han sido nombrados por el líder europeo. La situación balcánica será analizada por los gobernantes de los Veintiocho durante una cena de trabajo en Bruselas, la noche de este jueves.
"Propondré a los líderes (europeos) que tomemos acción, incluyendo en comunicaciones estratégicas a los países de la región", explicó Tusk antes de la discusión.
Serbia, Macedonia, Albania y Montenegro son candidatos oficiales a acceder a la UE, mientras que Bosnia y Kosovo son candidatos potenciales, pero sus procesos de adhesión avanzan lentamente. Por su parte la primera ministra británica, Theresa May, anunció que su país acogerá en 2018 una cumbre con los países balcánicos con el objetivo de "detener la interferencia rusa".
Los europeos acreditan que Moscú está implicada en un intento fallido de golpe contra la OTAN en Montenegro, a finales de 2016, y que ejerce una influencia cada vez mayor en la política interna serbia.
Las relaciones de ese país con su exprovincia de Kosovo, que declaró independencia unilateralmente en 2008, ha empeorado en los últimos meses, así como la tensión entre albaneses étnicos y macedonios en Macedonia.