Como en la película "Serpientes a bordo" protagonizada por Samuel L. Jackson, los pasajeros del vuelo 231 de Aeromexico de las 14:05 horas a la Ciudad de México, vivieron en carne propia la trama de la cinta, cuando uno de los tripulantes se percató que en un compartimento superiorer salía una víbora de aproximadamente 40 centímetros de largo.
Antes del aterrizaje en la Ciudad de México pasajeros pusieron sobre el reptil cobijas y revistas para poder retomar sus lugares en los asientos.