Indonesia. – El vínculo entre los abuelos y sus nietos es único, pero en Indonesia una abuelita se convirtió en el sustento de su nieto, de apenas dos años, quien fue abandonado por sus padres después del divorcio, por lo que la adulta mayor trabaja en un crucero como estatua viviente.
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Mumun, de 60 años, trabaja a diario como estatua viviente para ganar un poco de dinero y así alimentar a su nieto, quien fue abandonado por ambos padres luego de divorciarse.
Ambos viven en la calle y desafortunadamente el dinero que gana no le es suficiente para sostenerse ambos, por lo que le da prioridad a comprar leche y arroz para el menor, aunque ella a veces se quede sin comer.
A diario la mujer pinta su cara y extremidades y pasa horas de pie cargando a su nieto para ganar algo de dinero. Ella como muchas personas en todo el mundo perdió su empleo tras la pandemia de COVID-19, por lo que con el poco dinero que le quedaba compró un bote de pintura plateada y dedicarse a entretener a los peatones de un cruce cerca de la provincia Tangerang.
Antes de la pandemia Mumun trabajaba como asistente de limpieza, y con lo que le pagaban podían mantenerse ella y su pequeño nieto.
Detienen a abuelita por ocultar droga en su silla de ruedas
Una mujer de 81 años de edad fue detenida en el aeropuerto internacional de José María Córdova en Antioquía, Colombia, cuando intentaba transportar droga en su silla de ruedas con destino a España.
La mujer, quien presuntamente viajaba sola, pretendía abordar un vuelo con destino a Madrid, sin embargo, al momento de hacer el tránsito migratorio se percataron que la silla de ruedas de la mujer tenía algo fuera de los normal, así que al hacer una inspección descubrieron varios kilos de un polvo blanco que dio positivo a cocaína ocultos en una de las estructuras de la silla.
PGG