En el panorama del romance y las relaciones de pareja, existen ciertas terminologías que se les adjudican a aquellos que no necesariamente están buscando algo serio o formal, o que están tan conformes con la amistad que tienen y temen dar el siguiente paso.
Todo se debe a los cambios percibidos en la mente humana a lo largo de los años, permitiendo definir tipos de parejas que no comparten un vínculo tan estrecho como el tradicionalmente visto.
¿Qué es un amigovio?
De acuerdo con el psicólogo español Francisco Pérez, la palabra ‘amigovio’, es el resultado de combinar ‘amigo’ y ‘novio’,y significa que las personas involucradas en la relación son especialmente cercanas pero que su atracción tiende a ser meramente sentimental y no tanto sexual.
Se entiende que la pareja no formaliza su estatus de noviazgo a través de una amistad íntima que ambos prometen preservar a toda costa. Esto puede o no funcionar a largo plazo dadas las posibles diferencias entre lo que ambas partes esperan de la relación, por lo que aún siendo un estatus progresivamente más aceptado, no se le considera tan común.
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¿Qué implica ser 'amigos con derecho'?
Por otro lado, los ‘amigos con derecho’ son el opuesto exacto, dos personas que se atraen sexualmente pero no pretenden vincularse de forma emocional, acordando intimar físicamente sin comprometer su soltería y sin ninguna otra atadura, lo que desde luego, conlleva su propia serie de desafíos que fácilmente podrían poner fin a la amistad existente entre ambos.
De acuedo a especialistas, este modelo de relación de pareja tiende a conducir a conceptos erróneos de amor, dado que típicamente consiste en encuentros sexuales libres de compromiso, que en la gran mayoría de los casos, no culminan en genuino romance entre los involucrados.
Mientras tanto, los ‘amigovios’ suelen mantener una comunicación mucho más sana y sincera, y las posibilidades de que la relación escale de nivel hacia una formalidad son mayores, aún si no es lo que las partes están esperando.
La sociedad se ha visto cada vez más permisiva de relaciones sentimentales o sexuales como estas, sin embargo existen riesgos mayores que los típicamente asociados a una pareja formal, como por ejemplo, en el cuidado d ela salud sexual, por lo que aún están lejos de ser recomendadas ampliamente.
No obstante, así como tener una relación de ‘amigovios’ o ‘amigos con derecho’ supone inconvenientes, también es una forma de preservar un sentido individual de libertad si así se desea.
Ambas relaciones sentimentales buscan pasar un buen rato, disfrutando de la sexualidad y la intimidad, pero huyendo de todo lo que implica tener pareja. No hay ningún proyecto de futuro juntos. Se vive en el presente y cada persona es libre para tener otras
relaciones sentimentales.