Historias oscuras, paganismo y mucho fuego... bienvenidos sean al universo del black metal, género extremo y oscuro, bienvenidos sean a Hiborym y Sabbathan, dos propuestas locales que suman más de 30 años de riffs y gritos descomunales, cuyo origen se dio en los años noventa con un integrante fundador, Masthema Sancia, parte activa de estos proyectos que de manera reciente han sacado producciones en vinilo y CD, ambas con una buena respuesta y a punto de agotarse las ediciones.
Masthema hace retumbar las pieles de trueno (batería) con Hiborym, banda a la que se suman Asbeel (guitarra líder), Shakal Blood (bajo), Maese Dagon (cantos) y Ildabaoth Achamoth (guitarra rítmica), quienes sacaron el disco de siete pulgadas en edición de vinilo “The chant of a pagan tyrant”, con el sello Macabre End Productions, que incluye dos temas nuevos, jamás editados, y que a finales del año pasado se lanzó con un tiraje de 200 copias, que ya están por agotarse.
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De esta primera experiencia de la banda en el formato de vinilo, Masthema comenta:
“Salieron copias en color negro y color magenta, la idea de cuatro portadas fue mía. La presentación como tal tiene como parte conceptual del paganismo, que está plasmado 100 por ciento, por eso una portada es el fuego, otra el Hekate, el círculo del sol y el paganismo puro.
“Hiborym nació en el año 92 y esta es la primera vez que nos editan en vinilo. Tenemos seis tapes y dos CD, uno de esos es un compilado de las dos décadas de la banda, ‘XX years of consecrated black metal-1992-2012. Under the shadow of my fist’ y el otro CD es un split, ‘Invocaciones primigenias’, con Ereshkigal, de la CdMx. Los dos discos salieron con Azermedoth, sello de la CdMx”.
¿Cuál género tocan?
Sobre el género que practica la banda, este se adapta a los tiempos actuales, en los que la apertura se ha dado, con una filosofía e incluso de búsqueda interna, aunque sigue siendo un género musical del subterráneo:
“El black metal es un estilo de vida, es una apertura hacia ti mismo, introspectiva como tal, al hablar de situaciones como satanismo, el paganismo, es porque venimos de raíces paganas, antirreligiosas, y la apertura ha sido mayor, sin embargo, aún pertenecemos a un grupo muy pequeño, muy reducido, es un tema cultual”.
Las canciones que integran este sencillo son “The chant of a pagan tyrant” y “The flame and the key (to Hekate)”, que en sus letras tienen algunas referencias a los orígenes de las antiguas culturas, una de ellas con el tema de las batallas y otra sobre un culto propiamente. Así lo menciona Masthema:
“El contenido lírico es sobre el oscurantismo precolonizado, porque tenemos una raíz amplia en las culturas que predominaron en nuestra región, va de la mano con sacrificios, adoraciones, de las ofrendas como tal, tienen un eslabón que las une. ‘The chant...’ es muy narrativa, que trata sobre un tirano fundido en las batallas, es como dejar tu alma, ahí se mencionan en italiano los elementos: agua, tierra, viento y fuego; la segunda canción es un culto a Hekate como tal”.
¿A qué suena el Black Metal?
El black metal tiene sus características, pero en este caso se trabajó más en la estructura musical:
“Las canciones tuvieron un giro musical, de estructura completa, porque la alineación sufrió cambios; es un black metal con mayor estructura musical y suena algo fresco, nuevo, crudo, incluso la parte acústica te da como esa parte mágica de seguir las letras”, comenta Masthema.
En 1993 nació Sabbathan, un año después que Hiborym, con demos en los años 1993, 1994, 1998 y 1999, y también con Macabre End sacó en 2020 el disco “Gazing through the black eyes of time”, y el año pasado salió “A pandemic era” con los sellos Mexican Steel y Detonation, que ya como disco es “sold out”. El estilo de esta banda, en la que lo acompañan Asbeel (guitarra y sintetizadores) y Shakal Blood (batería y bajo), es también black metal, pero más denso y desgarrado, en el que Masthema deja la batería para lanzar gritos e invocaciones:
“Sabbathan es un estilo más denso, hoy en día lo denomino un black metal neural-invasivo. El único ritual que hicimos y que pudimos llevar a un escenario fue con los brasileños Mystifier, de Brasil, en 2023. En Sabbathan canto, suena muy distinto al otro proyecto, pero trato de mantener una esencia como tal. En cuanto a temas abro más el abanico, hablo de leyendas, de licantropía, temas depresivos, emocionales, del desprendimiento del alma y del cuerpo, en ‘Gazing through the black eyes of time’, ‘Therion’, ‘Hypnotic insomnia’ e ‘Incinerator’, que son las cuatro canciones nuevas que conforman este EP”.
Con ambas bandas está grabando. Con Hiborym a partir de agosto se meten al estudio y ya que esté listo continuará la alianza con Macabre End. Con Sabbathan están en el proceso del disco nuevo, también con Mexican Steel, que son alrededor de siete u ocho canciones, y solo una se volverá a grabar, un tema de 1996. El disco llevará por nombre “Apocalyptic cataclysm”.
¿Cuáles conciertos siguen en puerta?
Pero es en directo donde se pone a prueba el verdadero culto a la oscuridad, y así Hiborym se alista para subir al escenario en dos eventos. El primero será el 20 de julio con Inquisition, de Colombia, junto con otras bandas en el salón Arturo B. de la Garza, en el Centro Guadalupe, organizado por Kaotik Productions, y el segundo será el 27 de julio con Yoth Iria (Grecia), y otras más en Factores Mutuos, Aramberri 514, Centro, en Monterrey, que convoca Lucifer’s Omen.
Masthema también cuenta crea contenido con “La vida es un podcast”, en el que invita a personajes de diversos ámbitos de la sociedad regiomontana, en el que cuando es necesario se aborda también el tema de la música.
rcm