El ‘Día Internacional de la Mujer’ no solo conmemora la lucha eterna de las mujeres por defender sus derechos, si no también, por su reconocimiento dentro de las artes, leyes, deportes, educación, salud, negocios y avances científicos y tecnológicos.
Tal es el caso del fenómeno que se le conoce como 'Efecto Matilda', que explica el olvido muchas de las contribuciones femeninas a la investigación científica a lo largo de la historia, donde el potencial femenino ha sido opacado, históricamente, en los ámbitos profesionales y académicos, especialmente en los creativos e intelectuales, mismo del cual es importante hablar este 8 de marzo.
Se sabe que según diferentes estudios de la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de Valencia, solo el 7,6 % de los referentes científicos incluidos en los libros de texto de la ESO son mujeres.
Este fenómeno de suprimir la contribución de las mujeres en el desarrollo de inventos o en la investigación, y también el reconocimiento frecuente de su trabajo a sus colegas masculinos ha sucedido durante siglos. Es por eso, que bajo este nombre, se busca acabar con la desigualdad del reconocimiento de logros científicos de mujeres a través de los años.
¿Por qué se llama Efecto Matilda?
Su nombre se origina gracias a Matilda Joslyn Gage, primera activista defensora de la injusticia que ha ignorado los hallazgos de brillantes científicas a lo largo de la historia.
Matilda fue sufragista y abolicionista de finales del siglo XIX en Estados Unidos que luchó por los derechos de las mujeres y de las minorías.
Escribió un ensayo publicado en 1883 con el nombre ‘Woman As An Inventor’, en el que describe este fenómeno, pero no le pone un nombre.
"Aunque la educación científica a la mujer le fue negada enormemente, algunos de los inventos más importantes del mundo se deben a ella", escribió.
Matilda fue víctima de este mismo efecto que denunciaba, al haber sido silenciada por sus colegas y no reconocida debidamente por la historia, según investigadores.
“La proporción de inventores femeninos (con patentes) es mucho menor que la de masculinos, lo que se debe al hecho de que la mujer no posee la misma de libertad que el hombre", analizó Gage en el artículo publicado en la revista The North American Review.
#NoMoreMatildas
Para frenar la invisibilización que las mujeres han tenido en la ciencia, a nivel mundial ha surgido el movimiento #NoMoreMatildas, impulsada por la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas (AMIT) de España, con el que objetivo de buscar crear contenido educativo que recupere a las científicas de la historia.
Aunque la iniciativa que empezó en España, se ha popularizado alrededor del mundo, buscando conscientizar a la sociedad sobre la poca visibilidad que siguen teniendo las mujeres en el ámbito científico en todo el mundo.
También propone recuperar los nombres de las mujeres de la ciencia que fueron silenciados y olvidados, llevándolos a los libros escolares y aulas de aprendizaje con la idea de despertar ejemplos y la vocación científica de las niñas.
"Ya iba siendo hora que se recuperen tantas figuras perdidas, no solo porque es de justicia histórica, sino porque pueden ser modelos que cambien para siempre la percepción que tienen las niñas acera de la ciencia y lo adecuadas que son para ellas", menciona Carmen Fenoll, presidenta de AMIT para BBC Mundo.
Además, explicó que es importante para las nuevas generaciones, que las niñas y jóvenes tengan de referencia y ejemplo a las mujeres que han contribuido a las áreas de ciencia a lo largo de la historia.
“Realmente sí impacta mucho la representación porque una niña que toda su vida ha visto que el científico es este (hombre blanco), nunca se va a imaginar que ella puede estar en la ciencia. Es importante que una niña vea a otra niña descubriendo cosas, haciendo experimentos”, explicó la biotecnóloga.
Con el objetivo de fomentar las vocaciones científicas y tecnológicas en niñas y jóvenes, se celebra cada 11 de febrero el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Pues tan solo el 28,5 % de las plazas en carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, por sus siglas en inglés) son ocupadas por mujeres. Solo una de cada tres personas dedicadas a la investigación en todo el mundo son mujeres.
MKHC