ESTADOS UNIDOS.- Krispy Kreme, tras escuchar que un joven viajaba de Minnesota a Iowa y de regreso para revender donas por hasta dos mil pesos, detuvo su negocio. Sin embargo, días después de que la historia saliera a la luz, la compañía decidió regalarle 500 docenas a Jayson Gonzalez para que continúe vendiéndolas.
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Jayson Gonzalez contó a Associated Press que cada fin de semana, manejaba de 430 kilómetros de Champlin, Minnesota a Clive, Iowa y de regreso para comprar hasta cien cajas de donas de Krispy Kreme y así entregarlas a sus clientes de St. Paul, Minnesota, para después vender cada docena entre 17 y 20 dólares (325 y 382 pesos) en su estado natal donde la compañía dejó de vender su producto desde hace 11 años.
Al enterarse de ello, Krispy Kreme decidió ponerle un fin al negocio del joven de 21 años, alegando que el esquema de Gonzalez presentaba un "riesgo" para la compañía.
Pero después de que la historia se hiciera viral, Krispy Kreme cambió su opinión y en un comunicado compartido a Business Insider, la empresa dijo que ahora apoya el negocio de Gonzalez, quien usaba el dinero de sus ventas para pagar sus estudios en la Universidad Estatal Metropolitana.
Para ayudar a que Jayson logre su objetivo, Krispy Kreme donó seis mil donas (o sea 500 cajas con una docena). La empresa dijo que había pedido a Gonzalez parar su negocio para "asegurar la calidad" de su producto.
"Nuestra principal preocupación es que las donas que Jayson venda mantengan nuestra alta calidad de producto, debido a la distancia y manera en la que lo transporta y distribuye. Estamos felices de trabajar con Jayson como un operador independiente para asegurar una entrega constante de nuestras donas de alta calidad para nuestros fans en Minnesota. Le deseamos a Jayson un gran éxito y estamos encantados de ayudarlo con 500 docenas de donas cuando reanude su negocio".
JM
ESTADOS UNIDOS.- Krispy Kreme, tras escuchar que un joven viajaba de Minnesota a Iowa y de regreso para revender donas por hasta dos mil pesos, detuvo su negocio. Sin embargo, días después de que la historia saliera a la luz, la compañía decidió regalarle 500 docenas a Jayson Gonzalez para que continúe vendiéndolas.
Jayson Gonzalez contó a Associated Press que cada fin de semana, manejaba de 430 kilómetros de Champlin, Minnesota a Clive, Iowa y de regreso para comprar hasta cien cajas de donas de Krispy Kreme y así entregarlas a sus clientes de St. Paul, Minnesota, para después vender cada docena entre 17 y 20 dólares (325 y 382 pesos) en su estado natal donde la compañía dejó de vender su producto desde hace 11 años.
Al enterarse de ello, Krispy Kreme decidió ponerle un fin al negocio del joven de 21 años, alegando que el esquema de Gonzalez presentaba un "riesgo" para la compañía.
Pero después de que la historia se hiciera viral, Krispy Kreme cambió su opinión y en un comunicado compartido a Business Insider, la empresa dijo que ahora apoya el negocio de Gonzalez, quien usaba el dinero de sus ventas para pagar sus estudios en la Universidad Estatal Metropolitana.
Para ayudar a que Jayson logre su objetivo, Krispy Kreme donó seis mil donas (o sea 500 cajas con una docena). La empresa dijo que había pedido a Gonzalez parar su negocio para "asegurar la calidad" de su producto.
"Nuestra principal preocupación es que las donas que Jayson venda mantengan nuestra alta calidad de producto, debido a la distancia y manera en la que lo transporta y distribuye. Estamos felices de trabajar con Jayson como un operador independiente para asegurar una entrega constante de nuestras donas de alta calidad para nuestros fans en Minnesota. Le deseamos a Jayson un gran éxito y estamos encantados de ayudarlo con 500 docenas de donas cuando reanude su negocio".
EE.UU.- Krispy Kreme, tras escuchar que un joven viajaba de Minnesota a Iowa y de regreso para revender donas por hasta dos mil pesos, detuvo su negocio. Sin embargo, días después de que la historia saliera a la luz, la compañía decidió regalarle 500 docenas a Jayson Gonzalez para que continúe vendiéndolas.
Jayson Gonzalez contó a Associated Press que cada fin de semana, manejaba de 430 kilómetros de Champlin, Minnesota a Clive, Iowa y de regreso para comprar hasta cien cajas de donas de Krispy Kreme y así entregarlas a sus clientes de St. Paul, Minnesota, para después vender cada docena entre 17 y 20 dólares (325 y 382 pesos) en su estado natal donde la compañía dejó de vender su producto desde hace 11 años.
Al enterarse de ello, Krispy Kreme decidió ponerle un fin al negocio del joven de 21 años, alegando que el esquema de Gonzalez presentaba un "riesgo" para la compañía.
Pero después de que la historia se hiciera viral, Krispy Kreme cambió su opinión y en un comunicado compartido a Business Insider, la empresa dijo que ahora apoya el negocio de Gonzalez, quien usaba el dinero de sus ventas para pagar sus estudios en la Universidad Estatal Metropolitana.
Para ayudar a que Jayson logre su objetivo, Krispy Kreme donó seis mil donas (o sea 500 cajas con una docena). La empresa dijo que había pedido a Gonzalez parar su negocio para "asegurar la calidad" de su producto.
"Nuestra principal preocupación es que las donas que Jayson venda mantengan nuestra alta calidad de producto, debido a la distancia y manera en la que lo transporta y distribuye. Estamos felices de trabajar con Jayson como un operador independiente para asegurar una entrega constante de nuestras donas de alta calidad para nuestros fans en Minnesota. Le deseamos a Jayson un gran éxito y estamos encantados de ayudarlo con 500 docenas de donas cuando reanude su negocio".
EE.UU.- Krispy Kreme, tras escuchar que un joven viajaba de Minnesota a Iowa y de regreso para revender donas por hasta dos mil pesos, detuvo su negocio. Sin embargo, días después de que la historia saliera a la luz, la compañía decidió regalarle 500 docenas a Jayson Gonzalez para que continúe vendiéndolas.
Jayson Gonzalez contó a Associated Press que cada fin de semana, manejaba de 430 kilómetros de Champlin, Minnesota a Clive, Iowa y de regreso para comprar hasta cien cajas de donas de Krispy Kreme y así entregarlas a sus clientes de St. Paul, Minnesota, para después vender cada docena entre 17 y 20 dólares (325 y 382 pesos) en su estado natal donde la compañía dejó de vender su producto desde hace 11 años.
Al enterarse de ello, Krispy Kreme decidió ponerle un fin al negocio del joven de 21 años, alegando que el esquema de Gonzalez presentaba un "riesgo" para la compañía.
Pero después de que la historia se hiciera viral, Krispy Kreme cambió su opinión y en un comunicado compartido a Business Insider, la empresa dijo que ahora apoya el negocio de Gonzalez, quien usaba el dinero de sus ventas para pagar sus estudios en la Universidad Estatal Metropolitana.
Para ayudar a que Jayson logre su objetivo, Krispy Kreme donó seis mil donas (o sea 500 cajas con una docena). La empresa dijo que había pedido a Gonzalez parar su negocio para "asegurar la calidad" de su producto.