Después de cuatro años de polémica, la Princesa Mako contrajo matrimonio con el plebeyo Kei Komuro, un humilde abogado con quien había estado saliendo anteriormente. El acta quedó registrada en una oficina del barrio local a las 10 a.m. hora local de este martes 26 de octubre.
La unión de esta pareja ha sido una de las más criticadas en Japón debido a que se rompe con la tradición familiar al no casarse con un hombre que pertenezca a la familia real. Mako, además rechazó un pago único de un millón de dólares del gobierno al que tenía derecho como miembro de la realeza.
En esta ceremonia no hubo banquetes de boda ni rituales comunes en los que dos personas unen sus vidas, mencionó la Agencia de la Casa Imperial, en donde fue presentado el documento del matrimonio.
Debido a la cobertura negativa de la controversia que causó su relación, Mako sufrió un desorden de estrés postraumático, del que poco a poco se está recuperando, según la agencia oficial de asuntos reales, IHA.
Se conjetura que la pareja tiene planes de trasladarse a Estados Unidos. No es un hecho que la ex princesa esté pensando en trabajar allí, sin embargo, ya que estudió Arte y Patrimonio Cultural en la Universidad Internacional Cristiana de Tokio, se cree que sus oportunidades no se han limitado.
Al término de este compromiso, se han abierto debates de acuerdo a cambiar las reglas de la realeza nipona para que además de los hombres, sean también las mujeres quienes puedan decidir casarse con un plebeyo sin abandonar a la familia real.
AA