La presencia de niños en diferentes espacios públicos genera molestia en algunos los adultos, por ello, algunos hoteles y restaurantes se han limitado el derecho de admisión a menores de edad, con el propósito de evitar conflictos con sus clientes que no tienen hijos.
El particular caso ocurrido en el mercado de la Cebada, en Madrid España, es el ejemplo perfecto de estas situaciones, pues existe un conflicto entre los comerciantes y las personas que acuden por las tardes con sus hijos, debido a que, acusan, “los menores son un estorbo y dificultan la compraventa”.
De acuerdo con un escrito de Antonio Villarreal para El Confidencial, los comerciantes se justifican con la seguridad de los menores, señalan que se pueden hacer daño de muchas formas variadas y extravagantes.
“Hemos llegado a encontrarnos un bebé con pañales solo en el parking”, dicen. Con ello, piden que cese la presencia de los menores.
En tanto, las madres y padres acusan que esta situación se trata de un flagrante episodio de niñofobia y hasta de apartheid infantil.
La situación ha generado polémica en medios de comunicación, redes sociales y en la sociedad en general. El tema ha sido tocado decenas de veces por expertos, quienes tachan de intolerantes a quienes no quieren la presencia de los menores.
Los expertos señalan que no está mal destinar espacios para adultos sin niños, pues existen lugares específicos para fumadores, para hombres, mujeres, etcétera, donde no está mal visto el “derecho de admisión”,
El problema surge, según con los expertos, cuando los menores no son bien recibidos en espacios públicos al que cualquiera podría acudir, como parques, plazas públicas, cines, aeropuertos, entre otros.
ZNR