ESPECIAL.- Como si se tratara de una película, un piloto brasileño de nombre Antonio Sena vivió una travesía luego de que tuviera que realizar un aterrizaje forzoso en medio del Amazonas en Brasil debido a que la avioneta que piloteaba presentó problemas. El hombre de 36 años tuvo que pasar 36 días en la selva hasta que lograron localizarlo.
La historia de Antonio Sena se volvió viral en su país de origen y debido a su difusión ahora se ha dado a conocer en varios países. De acuerdo con medios locales, después de que el piloto aterrizó su avioneta en el Amazonas, logró salvar una mochila con un poco de comida y otros víveres.
Antonio Sena se quedó una semana cerca de la avioneta esperando a que lo localizaran, sin embargo, aunque él veía a los equipos de búsqueda sobrevolar el área, estos no podían encontrarlo. Una semana después del aterrizaje, la avioneta se incendió por lo que el hombre tomó la decisión de caminar en el Amazonas.
Antonio Sena comenzó a caminar varios kilómetros y recorrer el Amazonas en donde se encontró con varios animales, entre ellos serpientes y cocodrilos. Cuando sus víveres se agotaron, el piloto brasileño tuvo que alimentarse de algunos huevos de aves y frutos silvestres que encontraba a su paso.
Tras un poco más de un mes, Antonio Sena encontró por casualidad a un grupo de recolectores de nueces que trabajaban cerca de donde él se encontraba. Estas personas fueron las encargadas de avisar a las autoridades del paradero del aviador, quien a la mañana siguiente fue rescatado.
Tras 36 días en el Amazonas, el hombre fue rescatado por un helicóptero del Grupo Aéreo de Seguridad Pública de Pará, que lo llevó hasta la ciudad de Santarém en donde se reencontró con su familia, después fue llevado a un hospital en donde fue atendido por la deshidratación que presentaba y heridas leves.
mvls